• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal
  • Saltar al pie de página

Judíos & Judaísmo

antiguo, novedoso, sagrado.

  • ¿Nuevo en el Blog?
  • Acerca del Autor

Una parte de Dios

22/11/2013 por Diego Edelberg 4 comentarios

 

Educar en preguntas

Extrañaba escribir publicaciones breves después de haber escrito un ebook tan largo. Así que aquí regreso a lo breve que como dicen, “lo bueno si breve, dos veces bueno”.

El domingo pasado en mi clase con alumnos y alumnas de 12 y 13 años discutimos sobre Dios. Estas clases son mis favoritas. Los chicos a esa edad aún no están condicionados totalmente por aquella doctrina que llamamos “educación” y que muchas veces cierra el proceso de descubrimiento en pos de ofrecer respuestas finales que lo hagan a uno útil en el sistema escolar y luego al buscar un trabajo. Generalmente educamos para que nuestros alumnos tengan respuestas. A mi me gusta educar para que mis alumnos tengan cada vez más preguntas y dudas porque estoy convencido que así se crece más y la vida se hace más divertida.

 

Una parte de Dios

Mientras discutíamos por qué Dios es tan difícil de capturar, una de mis alumnas me ofreció una de las mejores respuestas que he escuchado en los últimos años: “es difícil capturar a Dios porque somos parte de Dios”. ¡Espectacular! Sin embargo una frase así debe ser cuidadosamente explicada porque rápidamente podríamos caer en la conclusión que nosotros mismos somos Dios. Pero lo que la tradición judía enseña es que cada uno de nosotros tiene una parte de Dios.

No podemos separarnos completamente de Dios y verlo como un objeto. Por ese motivo nunca podemos ni podremos capturar su totalidad. Querer ver a Dios es como querer ver nuestros ojos sin un espejo adelante. En ese sentido mi alumna tenía razón: Dios es todo incluido nosotros mismos.

 

Tan grande como el mar, tan pequeño como sus olas

Una metáfora que leí hace poco y me parece muy a tono con toda esta idea es la que dice que Dios es como un océano y nosotros somos sus olas. Las olas parecen estar separadas del océano, subiendo y bajando a su voluntad. Pero aunque parecen estar separadas, las olas están hechas del mismo océano y no pueden existir sin el mismo. El océano a su vez es mucho más que la totalidad de las olas y sin embargo podemos aprender mucho del océano mirando el comportamiento de sus olas. Del mismo modo podemos aprender mucho de Dios mirando el comportamiento de sus criaturas, es decir mirando a otras personas.

 

Shema Israel

Así se hace evidente una de las expresiones más famosas y centrales del pueblo judío: Adonai Ejad (Dios es Uno). Repetimos el Shema Israel todos los días dos veces por día no porque no lo entendamos sino porque debemos recordarnos que Dios es parte de todo incluidos los seres humanos con los que estamos violentamente en desacuerdo. Cuando cerramos los ojos para recitar el Shema debemos por un instante hacer el esfuerzo más grande que podamos y recordarnos que toda la Creación (montañas, océanos, bosques, ciudades, hormigas, amigos, desconocidos, abrazos, canciones, besos, miradas, dientes, ¡todo!) comparte Una cosa en común. Dios, bendito sea Su nombre.

Archivado en: Aforismos, Citas, Espiritualidad y Religión, Judaismo Hoy Etiquetado como: adonai, chicos, duda, ebook, judaismo, shema israel

Todas las cosas están conectadas

25/04/2013 por Diego Edelberg Deja un comentario

 

Hay un cuento corto del Talmud que me gusta utilizar para iniciar el ciclo de formación a través del cual los chicos y chicas se preparan para convertirse respectivamente en Bar y Bat Mitzva. El estado de Bar o Bat Mitzva representa un antes y un después en el ciclo de vida judío. A partir de ese momento los judíos consideramos a los “chicos” como “adultos” en el sentido que según nuestra tradición ya son conscientes de sus propias decisiones asumiendo la responsabilidad de su propia existencia. Por supuesto que no nos referimos a que tienen que sustentarse económicamente ni casarse pero deben darse cuenta que sus vidas tienen ramificaciones y afectan a todo el mundo.

El cuento que utilizo para transmitirles esta idea es breve pero hermoso. Dice así:

 

Había una vez un sabio que estaba caminando por una carretera y vio a un anciano plantando un algarrobo. Le preguntó: «¿Cuántos años le tomará a este árbol dar su fruto?» El hombre respondió que necesitaría 70 años. Entonces el sabio le preguntó: «¿consideras que eres lo suficientemente sano como para vivir todo ese tiempo y comer de su fruto?». El hombre respondió: «Encontré un mundo fructífero porque mis antepasados lo plantaron para mí. Así, también plantaré para mis hijos». 

 

Cada generación está literalmente anclada a la siguiente a través de sus acciones. Nosotros dependemos de los que vinieron antes y eventualmente algún día las generaciones que siguen dependerán de lo que nosotros hagamos hoy.

Pero lo más importante es reconocer que del mismo modo que estamos conectados a través de diferentes generaciones también estamos conectados los unos con los otros ahora mismo. Cada persona que conocemos es parte de nosotros. Cada uno de nosotros forma parte del equipo más importante del mundo: el equipo de la humanidad. Por lo tanto cada uno debe contribuir con lo mejor que puede y contagiar al resto en ese proyecto. Solo cuando todos agregamos lo mejor que tenemos logramos ver la totalidad de la obra como si fuera realizada por una sola persona. Así el todo se hace más grande y transcendente que las partes.

Estamos unidos no solo con quienes ya no se encuentran físicamente sino también con quienes nunca podrán conocernos físicamente a nosotros. Simultáneamente estamos unidos con todas las personas que conocemos personalmente y más increíble aún con aquellas que no conocemos. Nada existe en aislamiento. Todo, absolutamente todo, está conectado con todo lo demás. Somos parte de un gran organismo que nos une.

Está lección les enseña a los Benei Mitzva (plural de Bar y Bat Mitzva), que al ser ellos los futuros “hombres y mujeres” de nuestra tradición -y del resto del mundo también- no hay nada más importante que la relación entre dos personas. No importa si estas personas son miembros de la misma familia o extraños totales. Cuando dos individuos toman conciencia que dependen uno del otro, que están conectados uno con el otro y que tienen una relación con el otro, se funden en una Unidad y se acercan más y más a lo que los judíos llamamos Dios.

Cuando decimos el Shema Israel estamos declarando que absolutamente todo está conectado. Y al mirar el mundo con esta visión tomamos conciencia que la perfección de las relaciones es tan extraordinaria que no hay dudas que representa la culminación de un plan maestro.

Archivado en: Aforismos, Citas, Espiritualidad y Religión, Judaismo Hoy Etiquetado como: adonai, adultos, antepasados, bat mitzva, chicos, conciencia, dios, judaismo, los otros, shema israel, talmud

Lo más leído

  • Como Recuperar el Propósito y Renovar el Compromiso con las Sinagogas
  • Esto es lo que necesitas recordar para nunca quedarte solo
  • El Mejor Comentario de RaShi a Toda la Tora - Humildad, Ignorancia, Curiosidad y Asombro
  • Qué pregunta debes cambiar para no tener miedo a la muerte
  • La Impactante Verdad sobre los judíos, los conversos y los no judíos
  • ¿Estás seguro que quieres ser libre para pensar y hacer lo que quieres?
  • "El Violinista en el tejado estaba equivocado": porqué el judaísmo está espiritualmente ascendiendo más que nunca
  • Las #11 Lecciones Judías Más Importantes de la Vida: la #7 es mi preferida
  • ¡No mandes a tus hijos a ese colegio! La educación infinita y el juego del miedo educativo en Chile
  • ¿Se puede ser inteligente y ser una persona de fe? Una respuesta al ateo arrogante

¡EXPANDÍ TU SABIDURIA!

 

diostapa




Acerca del Autor

 Hola, soy Diego Edelberg, el fundador del blog Judios&Judaismo.com. Me apasiona todo lo relacionado con la música, el judaísmo, la interpretación, la educación, la mitología, la filosofía, la religión, la ciencia, la historia, el arte, la física, la cosmología, la evolución, la sociología, la epistemología, la metafísica, la cabalá y en especial aquello que resulta contradictorio, paradójico y absurdo. Para conocer más sobre mi y de qué se trata mi blog visitá la sección Acerca del Autor

Todas las Publicaciones

Nube de Etiquetas

antisemitismo biblia comunidad conciencia conservador conversos diferencias dios duda edad media educación judía el cristianismo el siglo xx en la Modernidad esencia existencia de dios expectativa hong kong israel Jerusalem judaismo judios kabbalah la biblia las religiones maimonides mandamiento midrash misticismo misticismo judío modernidad ortodoxo pesaj plegaria pueblo de israel rabino reformista religion sentido shema israel siglo xvi Sionismo spinoza talmud tora

No me sigas, conversemos

  • Correo electrónico
  • Facebook
  • Google+
  • Twitter

Copyright © 2019 · Aspire Theme en Genesis Framework · WordPress · Iniciar sesión