• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido
  • Saltar a la barra lateral principal
  • Saltar al pie de página

Judíos & Judaísmo

antiguo, novedoso, sagrado.

  • ¿Nuevo en el Blog?
  • Acerca del Autor

Dios es «El Poder que otorga Salvación»

10/05/2013 por Diego Edelberg Deja un comentario

 

Quizás les llamó la atención las imágenes que subí en las últimas publicaciones que escribí sobre la Redención en el judaísmo. Estas imágenes pertenecen a una serie televisiva del mismo director que hizo la otra famosísima serie llamada “Lost”. Pero esta otra serie se llama “Fringe” y es la serie que estaba viendo mientras estudiaba y escribía sobre la Redención. No voy a contar detalles para que puedan disfrutarla ustedes mismos. Pero mi elección se debe a que en algún punto la trama gira en torno a una de las ideas más profundas sobre «qué es» o «qué hace» Dios. Y esta idea es la entender a Dios como “El Poder que otorga la Salvación”.

La idea de pensar a Dios como “El Poder que otorga la Salvación” pertenece a uno de los más grandes teólogos judíos del siglo XX. Su nombre es Mordecai Kaplan y hace dos años dedique en este blog una publicación entera a su pensamiento. Dicha publicación pueden leerla o escucharla en: El judaísmo Reconstruccionista: civilización, nacionalidad, religión y ciencia

Para Kaplan la definición sobre qué es Dios es justamente la Redención. A diferencia de Isaac Luria (de quién hablamos en las últimas publicaciones sobre la Redención) Kaplan no era un místico sino un racionalista. Sin embargo noten estos dos aspectos de su pensamiento. Primero, para Kaplan la definición característica de Dios es que Dios es “El Poder que otorga la Salvación”. Segundo, para Kaplan Dios no es un ser o una personificación que se encuentra en algún reino supernatural. Muy por el contrario, Kaplan ubica a Dios (entendido como “el impulso hacia la salvación”) precisamente en este mundo, en la gente, en la naturaleza y en la historia.

Para Kaplan el mundo entero- literalmente todo lo que existe- esta impregnado de un poder elemental, una fuerza o impulso que Kaplan mismo vincula a una “fuerza magnética” que conduce a todas las cosas a alcanzar la perfección. Ese poder es Dios en sí mismo. No es causado por Dios. No es creado por Dios. Ese poder es Dios. Este Dios es una experiencia inmediata en nuestros corazones, mentes y comportamientos en el preciso momento en que intentamos erradicar las fuerzas negativas de nuestra naturaleza.

Al mismo tiempo este poder existe fuera de nosotros mismos donde sirve el propósito de complementar el esfuerzo humano por adquirir la perfección más elevada que puede. Esto significa que la existencia de este poder en el mundo puede ofrecernos los recursos para vencer las enfermedades, pero sin los científicos que trabajan sobre estos recursos las curas nunca llegarán. A pesar de estar en el otro extremo del pensamiento místico de Luria, Kaplan parece arribar a las mismas conclusiones: nosotros somos socios con Dios en la Redención de Dios mismo y del mundo.

Incluso Kaplan coincide con Luria que en el tiempo presente (aquello que llamamos “historia”) el poder de la Redención de Dios aún no se ha manifestado en forma total. El Dios de Kaplan no es todopoderoso. Tal vez el mundo tiene latente este Poder que hace a la Salvación y sin embargo hay otros poderes que también operan en el mundo: el odio, la destrucción, la anarquía, el caos y las enfermedades incurables. Como humanidad hemos logrado curar ciertas enfermedades como la polio, ¿pero que hay del Cáncer o el SIDA? El Dios de Kaplan al igual que el de Luria necestia ser redimido. Y nuevamente es la humanidad la que puede ayudar a que el Poder se haga Redentor.

Finalmente al analizar la Redención o Salvación llegamos a la misma conclusión que hemos encontrado a lo largo de todas nuestras publicaciones sobre Dios en este blog: la imagen real de Dios según la tradición judía es muy diferente a las imágenes populares y convencionales que muchas veces heredamos. Todos nosotros crecimos con la idea que Dios es perfecto y “lo tiene todo bien”. Pero esto no es así si leemos detenidamente nuestros propios textos. En la teoría lo que escuchamos y leemos de Dios es verdad. En la practica no lo es. El Dios que experimentamos es un Dios que -según las fuentes místicas y las más racionales del judaísmo- nos necesita a nosotros para alcanzar Sú propósito. Este es un Dios que se frustra, sueña, anhela, castiga, se va, regresa, espera algo de nosotros y nos necesita para Ser y darle sentido a su existencia.

 

Archivado en: Dios de los judíos Etiquetado como: dios, el siglo xx, el tiempo, fringe, fuerza, isaac luria, judaismo, mordecai kaplan, mundo entero, Reconstruccionista

Mi Dios y Mi Plegaria Personal son Reales pero ¿a qué o a quién le estoy rezando?

15/02/2013 por Diego Edelberg 7 comentarios

 

En nuestra publicación anterior introdujimos un tema central del pensamiento teológico judío: los seres humanos cambian; pero Dios no. Este es el principio que da cierre a la discusión medieval filosófica sobre Dios y es Maimonides quien representa la culminación de este proceso cuando declara en su Mishné Tora que Dios es perfecto, eterno, no cambia ni muta. Además para Maimonides Dios no escucha porque no tiene oídos y ni siquiera ama porque no tiene sentimientos. Aunque nos resulta difícil reconocer esto al momento que uno reza, pide y agradece (puesto que según Maimonides parecería no haber nadie escuchando o preocupándose por nosotros) Maimonides mismo definió la plegaria como algo obligatorio.

Para nosotros los modernos este principio simplemente nos alerta de una limitación que ya somos conscientes: nuestra especulación racional, o mejor dicho nuestras palabras, tienen un límite al querer hablar acerca de Dios. Los humanos somos humanos y Dios es Dios. No tenemos acceso a Dios. No podemos conocer su esencia. No podemos saber cómo opera. No podemos saber qué planes tiene ni por qué elige que suceda lo que sucede. En el fondo no podemos saber nada con absoluta certeza. Y como no podemos objetivamente saber nada acerca de Dios ¿cómo podríamos declarar que Dios cambia de parecer frente a nuestros rezos?

Lo que si cambia son nuestras imágenes y metáforas. Estas pueden cambiar justamente gracias a que Maimonides declaró que son cosas cambiantes mientras que la esencia de Dios no lo es. Para nuestros antepasados Dios era un Papá, un Rey, un Señor o simplemente un Êl. Para Maimonides todos estas designaciones son simples metáforas, palabras que depositamos en lo innombrable e incognoscible. Por lo tanto si nuestras metáforas de Dios son simples expresiones subjetivas de nuestra limitada experiencia humana y si la naturaleza de los seres humanos es de hecho el cambio constante entonces nuestras imágenes y metáforas sobre Dios pueden ciertamente cambiar también. En pocas palabras lo que cambia son las metáforas e incluso a veces podemos llegar a ver estos cambios.

Comienza Shabat y al reflexionar sobre estos temas me pregunto ¿a qué o a quién le estoy rezando? Los dos más grandes teólogos modernos vienen en mi ayuda para lidiar con estas difíciles preguntas:

 

 

Rezar es tomar conciencia de lo asombroso, recuperar el sentido de aquello misterioso que anima a todos los seres, el margen divino en todos los logros. La plegaria es nuestra humilde respuesta a la inconcebible sorpresa de vivir.

Abraham Joshua Heschel

 

 

Como el poder que ordena el mundo y la salvación personal, Dios no es una personificación sino un Proceso. De todos modos nuestra experiencia de ese Proceso es enteramente personal…Aquellos que critican la concepción de Dios como un Proceso argumentan que es reducir la plegaria a una simple forma de “hablarse a uno mismo”. En un sentido eso es verdad pero debemos entender en qué sentido es verdad. Todo pensamiento – y la plegaria es una forma de pensamiento- es esencialmente un diálogo entre nuestro puro ego individual y nuestro ser en representación de un proceso que va más allá de nosotros mismos…

Mordecai Kaplan

 

En el fondo cuando hablamos de Dios no hay correcto o incorrecto. Cuando hablamos con Dios tampoco lo hay. El judaísmo ha vivido desde siempre con ambigüedad al momento de tener que lidiar con Dios. La mayoría de los judíos se imaginan un Dios completamente distinto incluso cuando están rezando juntos en la misma Sinagoga.

¿Dios escucha mis plegarias? Realmente no lo sé. Incluso si me escucha jamás esperaría que me responda del modo que mi esposa me responde cuando la llamo por teléfono. Mi conexión con Dios y mis metáforas de Dios son el producto de una respuesta a mi propia búsqueda personal enmarcada por la tradición judía y mi afirmación continua como miembro primeramente del pueblo judío y en forma más amplia de la comunidad humana como un todo. Mi plegaria es una manifestación de mi certeza absoluta que el pueblo judío al cual pertenezco es importante para la historia y en consecuencia yo también lo soy porque formo parte de dicha narración sin importar cómo me imagino a Dios en cada etapa distinta de mi vida. Al igual que Maimonides tengo muchos problemas para definir a Dios en palabras. Todo lo que digo termina siendo insuficiente para hacer justicia a mi fe y mis creencias. Pero rezo de todos modos todos los días y cuando lo hago generalmente (aunque confieso que no siempre) Dios se hace realidad y evidencia.

Archivado en: Dios de los judíos, Rezo Judío ayer y hoy Etiquetado como: antepasados, comunidad, maimonides, mordecai kaplan, pensamiento, plegaria, rezo

Dios te ama y es justo contigo…¿pero es omnipotente?

24/01/2013 por Diego Edelberg Deja un comentario

Escribí hace unas semanas sobre la omnipotencia de Dios desde la perspectiva tradicional judía. En resumidas palabras nos referimos a la noción que Dios tiene el control absoluto de Todo lo que sucedió, sucede y sucederá en la historia del Universo. Dios no depende de nada ni de nadie. No tiene genealogía ni descendencia. La omnipotencia de Dios es simplemente la idea que lo bueno y lo malo, lo caótico y lo ordenado es esencialmente Una Unidad Indivisible.

Si bien esta idea está completamente arraigada en la tradición judía y en la vida religiosa de muchas personas no-judías también, algunos pensadores judíos de la Modernidad han sugerido que deberíamos repensar la idea que Dios es omnipotente. Si bien a simple vista esta postura parece atrevida o incluso absurda (probablemente algunos ni siquiera permiten que una idea así se consolide en la mente), cuestionar la omnipotencia de Dios puede servir como catalizador para responder algunas preguntas difíciles.

Solo piensen cómo responderían a la pregunta ¿por qué Dios creó el Cáncer o el SIDA? Ante una pregunta filosa como esta, un Rabino como Mordecai Kaplan probablemente respondería que Dios no creó el Cáncer o el SIDA sino que Dios está siempre ayudándonos para hacer del mundo un lugar mejor pero el mundo no puede convertirse instantáneamente en lo que Dios espera. Por ese motivo Dios creó la “motivación” para que los doctores traten de descubrir una cura; creó también la “tecnología” para que los laboratorios mejoren sus investigaciones y creó el “amor” para que los familiares, amigos y la comunidad acompañen al que está sufriendo. En otras palabras no deberíamos sentir que Dios no nos quiere y nos manda enfermedades sino sentir que Dios nos ayuda de formas distintas. Si Dios no está dándote hoy todo lo que le pedís, eventualmente encontrará otra forma para que puedas disfrutar de la vida.

Este tipo de pensamiento implica la idea que Dios es una Fuerza Positiva que inyecta “salvación” en las formas de creatividad, amor y motivación. Pero el mundo incluye también otras Fuerzas que Dios no controla como ser las enfermedades congénitas y terminales o los terremotos y tsunamis en los que mueren miles de inocentes criaturas, entre otras tragedias. Esta idea de dos Fuerzas podría fácilmente llevarnos al dualismo o a la idea que hay dos dioses peleando por el control del Universo. Sin embargo Kaplan rechaza esta noción argumentando que Dios es Uno que combate ese otro poder con el objetivo de eventualmente restaurarlo a su control o erradicarlo. Pero a Dios le lleva un tiempo poder hacer esto y por eso el mundo no puede convertirse instantáneamente en lo que Dios espera.  Noten qué idea tan judía es ésta en la que Kaplan limita la omnipotencia de Dios pero se niega por todos los medios a culpar o negar a Dios. Kaplan cree que a veces sufrimos sin razón de ser y que de todos modos Dios es por definición justo y amoroso. O dicho al revés Dios nos ama y es justo a pesar que a veces nos pasan cosas que consideramos malas. Pero Dios no es omnipotente según Kaplan.

Entonces nos queda una elección: ¿Dios es un Ser Todopoderoso que controla nuestro destino, determina nuestra suerte en forma misteriosa y demanda que aceptemos su decreto sin cuestionamientos? ¿O acaso Dios es un Ser limitado que se enoja y llora por el sufrimiento humano pero es incapaz de eliminarlo?

¿Que respuesta elegirían ustedes?

Archivado en: Dios de los judíos Etiquetado como: mordecai kaplan

Lo más leído

  • Ayin: el concepto de Dios como Nada en el Misticismo Judío
  • El órgano más poderoso del cuerpo
  • ¿Cuál es el significado más profundo de Sucot?
  • El Mejor Comentario de RaShi a Toda la Tora - Humildad, Ignorancia, Curiosidad y Asombro
  • Esto es lo que necesitas recordar para nunca quedarte solo
  • Qué pregunta debes cambiar para no tener miedo a la muerte
  • ¿Estás seguro que quieres ser libre para pensar y hacer lo que quieres?
  • La razón irracional de la Halaja: un sistema absurdo para lidiar con el absurdo
  • "El Violinista en el tejado estaba equivocado": porqué el judaísmo está espiritualmente ascendiendo más que nunca
  • ¡No mandes a tus hijos a ese colegio! La educación infinita y el juego del miedo educativo en Chile

¡EXPANDÍ TU SABIDURIA!

 

diostapa




Acerca del Autor

 Hola, soy Diego Edelberg, el fundador del blog Judios&Judaismo.com. Me apasiona todo lo relacionado con la música, el judaísmo, la interpretación, la educación, la mitología, la filosofía, la religión, la ciencia, la historia, el arte, la física, la cosmología, la evolución, la sociología, la epistemología, la metafísica, la cabalá y en especial aquello que resulta contradictorio, paradójico y absurdo. Para conocer más sobre mi y de qué se trata mi blog visitá la sección Acerca del Autor

Todas las Publicaciones

Nube de Etiquetas

antisemitismo biblia comunidad conciencia conservador conversos diferencias dios duda edad media educación judía el cristianismo el siglo xx en la Modernidad esencia existencia de dios expectativa hong kong israel Jerusalem judaismo judios kabbalah la biblia las religiones maimonides mandamiento midrash misticismo misticismo judío modernidad ortodoxo pesaj plegaria pueblo de israel rabino reformista religion sentido shema israel siglo xvi Sionismo spinoza talmud tora

No me sigas, conversemos

  • E-mail
  • Facebook
  • Google+
  • Twitter

Copyright © 2019 · Aspire Theme en Genesis Framework · WordPress · Iniciar sesión