• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido
  • Saltar a la barra lateral principal
  • Saltar al pie de página

Judíos & Judaísmo

antiguo, novedoso, sagrado.

  • ¿Nuevo en el Blog?
  • Acerca del Autor

Sexualidad, mujer y familia judía en la era medieval

03/03/2014 por Diego Edelberg 5 comentarios

 

ATENCIÓN: esta publicación contiene material que se recomienda no sea escuchado por menores de edad. 

 

https://2d532b30f1c286934a5355e0af94660a6617ed0e.googledrive.com/host/0BwoNe5vEDh4jU1RTYWtDY1Jlenc/Judaismo-Medieval-19.mp3
(Duración 40:27 – 37 MB)

Introducción al estudio del género

A partir de la próxima publicación haremos la última transición en esta serie de publicaciones donde comenzaremos a abandonar la edad media para ir moviéndonos lentamente hacia la modernidad temprana. El objetivo principal de toda esta serie ha sido no solo conocer la historia judía sino analizarla en comparación con el cristianismo y el islam viendo qué interacción tenían los miembros de dichas religiones con las otras y cómo se van influenciado mutuamente. Voy a hacer mucho hincapié para que puedan ustedes aprender a diferenciar entre el período medieval que estuvimos viendo hasta ahora con respecto a la modernidad temprana que es lo que se viene en las últimas publicaciones de esta serie. Por supuesto que vamos encontrar continuidad en algunos temas puesto que la historia es una sola y está atada con el pasado. Pero también veremos discontinuidades que son muy interesantes justamente porque permiten entender en qué sentido el judaísmo hoy es diferente al que se practicaba hace 1000 o 500 años atrás.

Pero antes de comenzar a hacer esta transición vamos a enfocarnos en un tema más sobre la vida de los judíos medievales que en lo personal es uno de los más fascinantes y de los que más me entusiasma al revisar el pasado. Este tema es realmente novedoso en la historiografía, es decir el estudio de la historia misma, pero justamente lo que cautiva del estudio académico es que está todo el tiempo cambiando y ajustándose. Y en especial esto ocurre con el estudio académico de la historia lo cual en sí mismo ya es todo un tema puesto que nos presenta con la necesidad de entender quién es el que está narrando la historia y qué le interesa que nosotros sepamos bajo su propia visión. En otras palabras, nuestra visión del pasado está siempre configurada y definida por el modo que nos vemos a nosotros mismos en el presente. Y este es el caso con todo este nuevo tipo de literatura que ha emergido en los últimos años sobre la historia de las mujeres, la historia del género, la sexualidad y la familia. Esta manera de ver la historia es apasionante justamente porque está filtrada no por los grandes nombres y textos sino por el estudio de la gente común y corriente, gente como cualquiera de nosotros. Esta aproximación a la historia nos presenta con una imagen mucho más real y humana de algo que sino es visto como ajeno o lejano. La idea de estudiar el pasado pensando en personas del mismo modo que pensamos en nosotros mismos, o en nuestros padres o abuelos cada uno de ellos y ellas con sus temores, ansiedades, certezas y desafíos nos permite aún más entender quiénes somos.

Esta aproximación ha sido ya explotada en las tradiciones cristianas e islámicas así que no estamos hablando de algo radicalmente nuevo pero lo cierto es que recién en los últimos años los historiadores han podido armar un material similar dentro del judaísmo para explorar historias familiares de los judíos medievales. El desafío principal por el cual esto llevó o lleva más tiempo es que muchas veces de donde se desprende este tipo de información es de comentarios a la Biblia y la literatura rabínica que no solo están en hebreo y se dedican a un contenido muy particular que no todos comprenden claramente sino que mucho de este material fue escrito con la idea que nunca iba a ser publicado o distribuido en forma masiva como vimos con RaShi y su escuela. Por lo tanto poder extraer de este tipo de literatura una realidad social, particularmente en las relaciones sobre hombres, mujeres y niños no es para nada una tarea sencilla. Precisa por parte del investigador un profundo conocimiento de la literatura rabínica y no es una casualidad que los especialistas en este área en los últimos años han sido mujeres. De hecho un fenómeno que se da cada vez con más frecuencia (lo cual presenta otro tipo de desafío) es que muchas de estas mujeres que tienen doctorados en Talmud e historia son mujeres ortodoxas para quienes el acceso a estos textos desde una perspectiva tradicional judía están prohibidos. Pero justamente las mujeres logran introducirse en todo este mismo material desde otra perspectiva diferente a la de sus maridos en las yeshivot y paradójicamente muchas de ellas terminan escribiendo disertaciones impresionantes y conocen tal vez más que sus propios maridos sobre la literatura rabínica misma. Y por supuesto que lo más interesante de todo esto es que la visión o lectura femenina es muy diferente a la masculina. La mujer es sensible a temas que los hombres pasamos por alto y puede leer muchas veces en forma diferente lo cual es una bendición dentro del mundo moderno que ha revolucionado el modo en que entendemos incluso el rol de la mujer judía en la historia.

Así que vamos a comenzar por meternos muy por encima en este nuevo tipo de aproximación y para eso voy a presentarles dos ejemplos de este tipo de literatura para que puedan apreciar el potencial que esto tiene al estudiar la historia judía desde la perspectiva del género, la familia y la sexualidad en la era medieval.

 

El estudio académico de la familia y la mujer judía medieval

Si recuerdan en nuestra tercer publicación mencioné algunas de las fuentes principales que estamos utilizando e hice hincapié en el Genizah del Cairo. En muchos textos del Genizah surge una imagen de la mujer judía completamente distinta a la que a veces la gente construye en la modernidad. Hay textos en el Genizah y otras fuentes donde se menciona a la mujer haciendo negocios o ayudando a sus maridos e incluso escuchamos de madres solteras lidiando con contratos comerciales. Por lo tanto la imagen de la mujer judía encerrada en la casa haciendo sopa de matzá es un estereotipo totalmente distorsionado o incluso moderno y no antiguo o medieval. De hecho las mujeres durante la historia también ganaban dinero o hacían sus negocios, trabajan la tierra si era necesario, contribuían claramente con la economía del hogar y la comunidad; viajaban si era necesario al hacer negocios importantes y ayudaban a sus maridos a ganar más dinero. Todo esto lo sabemos a partir de estos textos que realmente iluminan muchísimo más una época en la que imaginamos a la mujer como una simple compañera cuando en realidad era muchas veces la fuerza principal de la familia mucho más que los maridos. El Genizah como ya mencionamos es un material fascinante para descubrir todos estos temas y muchos más sobre la vida medieval bajo la órbita islámica.

Otro rol muy importante de las mujeres y que lo hablamos cuando analizamos la publicación sobre los judíos y las Cruzadas, es que las mujeres era muchas veces recordadas como mártires, dispuestas en momentos de crisis a asesinar a sus hijos y sus familias cuando sus maridos eran mas temerosos. No sé si esto es en realidad bueno o malo pero desde un punto de vista histórico nos muestra a la mujer como la encargada de afrontar las crisis familiares.

La historia de las mujeres desde un punto de vista histórico también ha sido realizado desde lo concerniente a la ley judía. En los últimos años ha surgido una material muy interesante sobre nida, eso es las leyes que involucran la menstruación analizando lo que separa el cuerpo femenino del cuerpo masculino. Particularmente lo que sería el “tiempo femenino” que se vive en forma distinta al masculino debido su ciclo mensual y cómo esto impacta en su estado de ánimo y sus decisiones. Este tema también se relaciona con lo que desde un punto de vista judío se define como pureza e impureza y es un tema que se absorbe también en el cristianismo y el islam. Por lo tanto también ha surgido una literatura muy especial sobre este tema comparando los ciclos femeninos desde distintos puntos de vista religiosos, ya sea cómo entiende el cristianismo o el islam este tema y se lo compara con el judaísmo y lo que sienten las mujeres judías mismas al respecto. De hecho las mujeres judías y las familias judías han sido comparadas en este último siglo con respecto a las mujeres cristianas y musulmanas.

 

(a) Las nodrizas judías

El estudio de las mujeres durante la edad media también nos ofrece una visión novedosa sobre la relación entre judíos, cristianos y musulmanes desde las relaciones que las mujeres tenían las unas con las otras lo cual era diferente a la relación que tenían los hombres. Podríamos mencionar como un ejemplo a Elisheva Baumgarten quien trabaja actualmente en la Universidad de Bar-Ilan en Israel.

Baumgarten escribió hace unos años una disertación sobre el lugar y rol de la mujer en la familia judía durante la Edad Media. Baumgarten nos presenta una perspectiva novedosa en un ensayo extraordinario que publica sobre la función de las nodrizas judías. Con esto nos referimos a mujeres judías que actuaban como nodrizas estando a cargo del proceso del nacimiento de los los hijos e hijas e incluso de ayudar a otras mujeres a parir.

Lo que Baumgarten descubre es que las mujeres estaban mayoritariamente a cargo de todo esto (y claramente podríamos comprenderlo en el contexto de los maridos no teniendo la menor idea sobre este tema o siendo espectadores como sucede generalmente hoy) y estas mujeres no solo guiaban a otras mujeres en todo el proceso de parir sino que ademas les enseñaban a los rabinos sobre la anatomía de las mujeres y los procedimientos técnicos para ayudar y dirigir a alguien para “dar a luz”.

Pero lo más destacado es que en los textos que Baumgarten analiza ella descubre sobre la relación entre nodrizas judías y nodrizas cristianas en la Edad Media. Es decir, que Baumgarten descubre textos en donde se pasan información y experiencias entre las unas y las otras.

Todo esto es muy importante porque si bien hemos hablado sobre el diálogo y las peleas sobre el judaísmo y el cristianismo siempre lo habíamos hecho desde la literatura masculina pero nunca lo habíamos hecho desde el contexto femenino y sobre qué es lo que estaba sucediendo entre mujeres en su cotidianidad. Gracias estas relaciones las mujeres judías y cristianas parecerían estar más conectadas y en forma distinta de lo que hacían tal vez sus maridos en un plano de argumentación más intelectual entre ambas religiones.

En todo esto vemos una relación novedosa sobre la interacción entre los judíos y los cristianos desde una perspectiva ahora que es femenina y sobre lo que las mujeres intercambiaban entre ellas.

Hay muchos ejemplos más que podría nombrarles pero simplemente estos nos ayudan a ver que existe claramente un nuevo academicismo, una nueva forma de ver el pasado, una nueva forma de incorporar la visión femenina en nuestro discurso de la historia y claramente este academicismo va a tener en las próximas generaciones, si bien ya lo posee hoy en día, un impacto tremendo en el modo que entendemos a los hombres y las mujeres en la tradición milenaria judía.

 

(b) La visión antropológica

La familia medieval judía ha sido también estudiada desde un punto de vista antropológico analizando las relaciones con otras religiones en relación a la vida ceremonial. Así tenemos obras como la de Ivan Marcus que describe distintos rituales medievales como por ejemplo el de la iniciación de los niños en el aprendizaje de la tradición judía donde se les regalaba una especie hoja con las letras hebreas y el profesor ponía miel sobre la hoja y los niños deben comer esa miel de ese modo relacionando la dulzura del aprendizaje. Marcus luego compara esto con la eucaristía cristiana y hace unos comentarios muy provocativos pero interesantes sobre cómo situar esta ceremonia en el contexto de la vida judía.

Por lo tanto contamos con todo un nuevo material en la actualidad sobre estas iniciaciones y otras costumbres medievales judías, libros sobre costumbres relacionadas con la muerte, de cómo los judíos vivían el día a día en sus hogares y como emergen todas estas costumbres desde el mundo antiguo y se van transformando en el período medieval.

 

(c ) Las metáforas femeninas de Dios

El tema del estudio contemplando el feminismo y el género también ha despertado todo un nuevo debate sobre la imagen de Dios como una representación solamente masculina. Tenemos desde la Creación Bíblica hasta la actualidad toda una literatura que lidia con el tema de las mujeres en personajes bíblicos como las matriarcas Sarah, Rebeca, Raquel y Leah, quienes están ahí y necesitan ser estudiadas y comprendidas en su propio contexto. Pero además uno debe comprender ahora cómo las actitudes rabínicas con respecto a las mujeres dio forma a la propia manera de ver la vida femenina.

Todos estos temas forman parte de una nueva exploración en la modernidad judía.

De lo que hablamos aquí no es solo del estudio de la historia judía. Sino que estamos haciendo hincapié en cómo las mujeres pueden crear nuevas poesías y nuevos textos que reflejan sus propios intereses y sus propias preocupaciones.

Algo que claramente nos permite ver esto es el impacto que han tenido estos temas en el Siddur, el libro de rezos, de los movimientos Reformista, Reconstruccionista e incluso Conservador.

Estos movimientos han re-escrito algunas partes de la liturgia para que ésta sea sensible al género femenino. Si bien podríamos argumentar que la liturgia y el rezo no es literal sino metafórico es clarísimo que todo este género es netamente masculino. Es decir, la plegaria judía que fue escrita por los rabinos, se dirige a Dios o aquello indefinible por el ser humano siempre en términos masculinos como “Él, Señor, Rey o Padre”.

Peor aún ¿por qué siempre le rezamos literalmente en nuestras plegarias al Dios de Abraham, Isaac y Jacob? ¿Qué hay de Sarah, Rebeca, Raquel y Leah? ¿Acaso ellas no son importantes en la historia judía? ¿Acaso Dios no es el Dios también de ellas? ¿Por qué es solo el Dios de los hombres?

Y de hecho estos temas han movilizado tanto a los judíos liberales que en la actualidad cuando recitamos las plegarias en nombre de estos ancestros judíos como garantes del pacto con Dios, si estamos en una Sinagoga Reformista por ejemplo, también agregamos la frase “Dios de las matriarcas”.

Hay un tema que es aún mas controversial con respecto a Dios siempre entendido como hombre y eso es cómo se han impregnado ciertos títulos y fórmulas en nuestra herencia milenaria. Si uno lo piensa un instante uno de los piutim (piut significa literalmente “poema litúrgico”) más famosos de nuestra tradición se llama “Avinu Malkenu” lo cual significa literalmente “nuestro padre, nuestro rey”. Soy consciente que uno no debe ser un “literalista” con respecto a la plegaria porque de hecho las palabras humanas ni siquiera alcanzan para definir a Dios ni poder reducir su nombre en sonidos. Tampoco quiero que se entienda que estoy proponiendo cambiar el texto del poema ni nada por el estilo. Simplemente estoy invitando a reflexionar ¿por qué creen que nunca nadie llamó a Dios “nuestra madre, nuestra reina”? ¿No hay acaso una necesidad de repensar esta liturgia de tal manera que tanto los hombres como las mujeres puedan sentirse que son participes de la tradición?

 

(d) La Shejina

Incluso se está recuperando hoy mucho más que antes (debido al auge de la Kabbalah en la modernidad) el lado femenino de Dios conocido en la tradición judía como la Shejina , es decir la Presencia Divina la cual es femenina. Y por lo tanto aquí vemos cómo es que los cabalistas construyen una sexualidad divina dentro de los textos del misticismo. Cuando analizamos las sefirot en nuestra publicación sobre Kabbalah en esta serie les dije que estas sefirot se encuentran en relación dialéctica e interactúan las unas con las otras. Dude de decirles en esa publicación -pero viene bien para lo que hablaremos en esta publicación- que dicha interacción sugiere una sexualidad. En otras palabras, muchos textos de la Kabbalah (e incluso fragmentos que Daniel Matt contaba que a veces no son traducidos del Zohar o de la literatura cabalística) lidian con una sexualidad cargada de imágenes y metáforas muy eróticas del mundo de la divinidad. Recordemos que según las enseñanzas de la Kabbalah, cada acción humana aquí en la tierra afecta el reino de la divinidad ya sea promoviendo o disminuyendo la unión (y nos referimos a una unión sexual metafórica) entre la Shejina y su pareja, el Hakadosh Baruj Hu, es decir el Santo Bendito es Él.

 

El legado ético de Eliezer ben Shmuel de Mainz

Todo esto hasta aquí ha sido una introducción para prepararnos al analizar los dos textos que voy a presentarles a continuación dentro de este campo fascinante de investigación que en los últimos años ha revolucionado el estudio académico del judaísmo.

Lo que quiero hacer es ilustrar las posibilidades que tiene este nuevo estudio ofreciéndoles dos textos que estoy seguro los van a intrigar y el segundo particularmente los va a sorprender y provocar puesto que muy inusual para el mundo medieval.

El primer texto que quiero presentarles fue escrito por un hombre llamado Eliezer ben Samuel de Mainz. Si lo recuerdan Mainz era donde estaba localizada una de las más importantes comunidades alemanas a lo largo del Río Rin (las otras dos eran Speyer y Worms donde había estudiado RaShI) y es en Mainz donde tan temprano como el siglo X emerge la primera academia rabínica de Rabeinu Gershom. Esta comunidad fue terriblemente afectada durante el período de las Cruzadas pero volvió a ser importante durante los siglos XII y XIII. Sin embargo cuando este texto fue escrito -y tenemos la fecha exacta que es el año 1357- esta comunidad estaba atravesando un declive importante. Una de las fechas que deben tener en cuenta mientras analizamos este texto es el año 1348 que es el año de la Peste Negra que diezmo no solo a la población europea sino también a esta comunidad judía de Meinz. Si lo recuerdan les comenté en la publicación anterior que los judíos había sido culpados por esta plaga, y por lo tanto esta comunidad en relación a la fecha del documento que vamos analizar había sido atacada y había perdido mucha gente como consecuencia de la peste por un lado y de los ataques hacia la comunidad por otras personas por otro lado.

El texto al que hago referencia pertenece a un judío que claramente conocía la obra de RaShI, de Maimonides, Rabeinu Tam, sabía de literatura rabínica y sin embargo no es un judío famoso. No tenemos nada más de esta persona que este texto que voy a leerlos y en consecuencia como dijimos al principio no pertenece a la literatura de elite que es la que leemos y conocemos generalmente sino que vamos a meternos en la visión del mundo de un judío común y corriente de la edad media viviendo en el norte de Europa.

El texto es lo que se conoce en hebreo como Tzvaa, eso es un legado ético. Un legado ético es un texto que encontramos en forma similar en el cristianismo, el islam y el judaísmo. En el judaísmo es un género literario que tiene una historia muy larga e históricamente siempre han sido hombres los que ha escrito estos textos. Cuando un hombre envejece en la tradición judía, escribe una especie de testamento ético que deja para sus hijos. Y esto se convierte en parte del legado que esta familia recibe junto con el dinero o los bienes materiales que esta persona ha logrado acumular durante su vida. En este texto el padre tiene la oportunidad de dejar el mensaje o el legado a través del cual quiere que ser recordado junto con las recomendaciones que quiere que sus hijos sigan en vida. Por supuesto que la mayoría de los legados éticos son idealizados y es muy común como parte de la naturaleza humana, tomar las palabras de la persona que partió como destacadas o más sabias que lo que en el día a día uno escucha. Y si encima de todo esto uno no tiene facilidad para transmitir un mensaje uno termina diciendo lo más esencial: se una buena persona, se obediente, no hagas daño, cuídate, etc. Es muy raro encontrar detalles específicos que describen las particularidades de una familia en este tipo de documento y del mundo circundante. Pero lo extraordinario de los fragmentos del texto que voy a compartir a continuación es que justamente hablan de temas mucho más amplios que tan solo consejos de vida.

Por lo tanto este es un texto escrito por un judío del cual no sabemos absolutamente nada más allá de lo que está escrito en este texto. Sabemos que el autor sobrevivió la Peste Negra y le deja un texto a sus hijos detallado cómo quiere que vivan el resto de sus vidas. Así que espiemos este mundo, que debo recordarles es un mundo muy privado y por eso estamos espiándolo. Eliezer no escribió este texto para que nosotros lo leamos públicamente en el siglo XXI. Está escrito solamente para miembros de la familia pero obviamente no hay familiares que puedan reclamar este texto y el mismo pertenece ahora como documento para la historia. Vamos a conocer así algo de la dinámica interna de la familia de Eliezer.

No voy a leerles todo el texto sino los comienzos de algunos párrafos y luego voy a leerles el último párrafo que es el más emotivo de todos. El texto comienza hablando en términos generales a todos sus hijos y luego se dirige a sus hijas. Eliezer escribe:

“Mis hijas deben obedecer escrupulosamente las leyes que se aplican a las mujeres: modestia, santidad, reverencia hacia sus esposos. Deben cuidadosamente cuidar los principios de su período menstrual y mantenerse separadas de sus maridos en dichos momentos. Las relaciones con sus maridos deben ser modestas, delicadas, con reverencia y silenciosas”.

Eliezer luego continúa detallado lo concerniente a los baños rituales, el rol de los maridos y en siguiente párrafo escribe una frase muy interesante que yo utilizo frecuentemente con mis alumnos hoy:

“Mis hijos e hijas deben vivir en comunidad evitando separarse de otros judíos para que sus hijos e hijas aprendan las formas del judaísmo”.

Esto significa que en estas pequeñas ciudades, destruidas por los ataques de las Cruzadas y la Peste, la necesidad de una comunidad era fundamental. No vivan solos, es el consejo de Elizer a sus hijos, vivan en comunidad. Hay algo de la experiencia religiosa que sólo puede ser sentido en el contexto de una comunidad social. Y por eso es interesante que ya en el siglo XIV (y en especial mirándolo desde la mirada actual con los desafíos de nuestro tiempo en las comunidades judías modernas) que Eliezer enfatice esto y nos los deje como un consejo: no vivas solo, busca otros judíos y viví con ellos celebrando la vida juntos.

Una de las obsesiones que aparece una y otra vez de aquí en adelante en el texto -y es clarísimo en el contexto de la Peste Negra- es la necesidad de estar limpio. Y esta limpieza material para Eliezer lleva a una limpieza espiritual. Eliezer es muy hábil al escribir y logra unificar y demostrar que ambas limpiezas están relacionadas. Pero esta obsesión por parte de Eliezer por la limpieza también está relacionada con la idea de estar saludable. Para él, estar bien de salud física y mental requiere que uno esté limpio.  Así continúa escribiendo:

“Cada Viernes por la mañana mis hijos e hijas deben bañarse y limpiarse para honrar el Shabbat. Prender las velas en el momento adecuado y en invierno recordar de encender el fuego temprano antes que anochezca para evitar desacralizar el Shabbat. Para cumplir como corresponde con el Shabbat las mujeres deben preparar hermosas velas y evitar los juegos de apuestas. De hecho mis hijos nunca deberían relacionarse con dichos pasatiempos. Durante la semana y los tiempos libres pueden jugar e incluso mis hijas pueden hacerlo con sus amigas en Rosh Jodesh pero nunca por dinero”.

Por lo tanto el tema de hacer apuestas, a pesar de las horribles condiciones en las que vivían, es claramente un pasatiempo popular tanto como lo es hoy. Pero volviendo a la limpieza:

“Sean muy cuidadosos de mantener sus casas limpias y ordenadas. Yo siempre fui muy escrupuloso con respecto a esto. Porque bien sabido es que la enfermedad siempre se encuentra en los lugares más sucios«.

Luego de enfatizar la limpieza comienza a describir las demandas mínimas que un judío debería poseer. Recordemos que Eliezer no es un Rabino ni un intelectual. Sin embargo noten que interesante lo mucho que conocia Eliezer luego de una vida de estudio:

“Sean cuidadosos con la pronunciación de Bendiciones. Cada una de estas cualidades se vuelve un hábito para aquel que estudia Tora ya que el estudio de la Tora lleva a la nobleza del carácter. Así que estudien la Ley, obsérvenla, salúdenla y semana tras semana lean al menos la lectura semanal con el comentario de RaShI.”

“Manténganse alejados de conversaciones frívolas que comienzan siempre con tribulaciones y terminan en destrucciones. Tampoco se rodeen de aquellos que hablan sobre temas poco serios. En las festividades y principalmente en Shabbat hagan felices a la gente más pobre de la comunidad, los menos afortunados, las viudas y los huérfanos. Todos ellos deberían ser los invitados principales de sus mesas”.

Eliezer introduce aquí una frase que es fascinante, una especie de prescripción o receta para sobrevivir como judío en la edad media:

“Sean siempre aquellos que ven y no son vistos. Que escuchan y no son escuchados. No levanten sospechas. No acepten invitaciones a grandes banquetes excepto que sea por motivos de un casamiento, un comida en casa de quien está atravesando un período de duelo, en la celebración de un nuevo miembro en el pacto de Abraham o en una reunión en honor a los sabios de la comunidad”.

Finalmente llegamos al último párrafo. Esto es lo último que su padre quiere decirle a sus hijos antes de abandonar este mundo. Eliezer escribe el detalle de cómo quiere ser enterrado. Hemos llegado al momento más íntimo en la relación entre este padre y sus hijos e hijas. Esta es la parte que cuando la leo por un lado siento vergüenza de estar entrando en la privacidad de esta familia mientras la espío ya que claramente no fue escrito para nosotros. Al mismo tiempo siento una terrible atracción por lo profundo que es este texto y muchas veces les confieso que se me llenan los ojos de lagrimas cuando leo las últimas líneas.

“Le ruego a mi esposa, mis hijos e hijas y a toda la congregación, que no se recite ningún discurso funerario en mi honor. No carguen mi cuerpo en un transporte caro. Límpienme bien, peinen mi pelo, corten mis uñas del modo que siempre hice en mi vida para que pueda ir limpio a mi descanso eterno del mismo modo que fui limpio a la Sinagoga cada Shabbat de mi vida. A una distancia de 30 cúbitos de mi tumba deben poner mi cajón (o sarcófago) en en el suelo y llevarme hasta mi tumba tirando de una soga atada al cajón. Cada 4 cúbitos deben detenerse y esperar un momento. Haciendo esto 7 veces permitirán que mi alma pueda encontrar disculpas por mis errores en esta vida. Pónganme en el suelo al lado derecho de mi padre. Y si el espacio es muy pequeño estoy seguro que me ama lo suficiente para hacerme un lugar a su lado. Si esto es realmente imposible póngame a su izquierda o cerca de mi abuela Yuta. Si todo esto no termina resultando práctico, por favor entiérrenme al lado de mi hija”.

Asumo que han notado que al final estaba describiendo la pérdida de una hija que seguramente fue muy doloroso para nuestro querido Eliezer. Ella ya estaba enterrada y por eso estaba refiriéndose a ella. Sin animo de adivinar podemos especular que tal vez falleció durante la Peste Negra.

No todos los textos tienen el potencial que tiene este texto pero lo que es interesantísimo aquí es que tenemos una mezcla entre lo mundano y lo espiritual de un judío común y corriente (por llamarlo de alguna manera).

 

La sexualidad judía versus la sexualidad cristiana por el Rabino Itzjak ben Yedidiah

Ahora quiero ofrecerles algo que es muchísimo más provocador. Este segundo texto puede ser incluso utilizado desde el punto de vista de la historia de la sexualidad pero lo que me interesa es que veamos como un judío particular veía a su prójimo cristiano y el mundo cristiano en general. En otras palabra aquí también vamos a lidiar con otro texto sobre las relaciones entre judíos y cristianos.

El texto es bastante controversial y a pesar que jamás imaginé decir algo así en este blog sobre Judíos y Judaísmo, si hay menores de edad probablemente no deberían escuchar el siguiente fragmento. Mi excusa para presentarlo aquí es que está escrito en hebreo originalmente, es un comentario rabínico a la Biblia y fue escrito en el siglo XIII por el Rabino Itzjak ben Yedidiah que vivió en Provenza al sur de Francia. El texto que voy a traducir supongo por primera vez al español pertenece a una investigación que hizo el Rabino y Académico Marc Saperstein sobre este Rabino del siglo XIII y figura en su libro titulado ‘Decoding the Rabbis: A Thirteenth-Century Commentary on the Aggadah’ y fue publicado por Harvard University Press en 1980 así que este material ya tiene más de 30 años desde que fue encontrado y presentado al público en general.  Lo más interesante de este texto es que quizás la mayoría de nosotros pensaría que los hombres y mujeres del medioevo no hablaban sobre sexo pero como verán a continuación lo hacían y bastante. Aquí va el texto:

Un hombre no circuncidado en la carne desea acostarse con una mujer de aspecto hermoso que le habla en forma seductora para atraerlo. Se impacienta su mente para estar con ella día tras día, cada vez más cansado en su intento de cumplir su deseo de acostarse con ella.

Ella finalmente va a la cama con el hombre que no ha sido circuncidado en la carne y apoya sus senos contra su pecho con gran pasión mientras él se mete dentro de ella repetidas veces a causa de su prepucio que es una barrera contra la eyaculación en el acto sexual. Así ella siente el placer y alcanza su orgasmo primero. Cuando un hombre no circuncidado se acuesta con ella y luego tiene que regresar a su casa, ella descaradamente lo agarra, aferrándose a sus genitales le dice: «Vuelve a hacer el amor conmigo». Esto es por el placer que ella encuentra en la relación sexual con él, desde los nervios de sus testículos – fuerte tendón de hierro y eyaculación-  como la de un caballo que tira su esperma como una flecha. Ellos están unidos sin separarse y él le hace el amor dos veces y tres veces en una noche, sin embargo, el deseo no se sacia.

  Y así actúa con ella noche tras noche. La actividad sexual le enflaquece su grasa corporal afectando su carne mientras dedica su cerebro por completo a la mujer, la cual es una cosa mala. Así su corazón se muere dentro de él, entre sus piernas se hunde y cae cada vez más profundo. Él es incapaz de ver la luz del rostro del Rey (Dios) porque los ojos del intelecto son revocados por las mujeres de manera que ahora no pueden ver la luz.

 Pero cuando un hombre circuncidado desea la belleza de una mujer y se une a su esposa o otra mujer gentil en su apariencia, él se encontrará realizando su tarea de forma rápida, emitiendo su descendencia en cuanto inserta su corona. Si él se acuesta con ella una vez, duerme satisfecho. Y no sabrá ella de nuevo durante otros siete días. Esta es la forma en que un hombre circuncidado actúa una y otra vez con la mujer que ama. Él tiene un orgasmo primero y no se contiene su fuerza. Tan pronto como se inicia la relación sexual inmediatamente llega a su clímax.

 Ella no tiene placer de él cuando se acuesta ni cuando se despierta. Incluso sería mejor para ella si él no la conociese ni se acercara a ella porque despierta su pasión en vano permaneciendo ella en un estado de deseo de su marido, avergonzada y confundida mientras que la semilla se encuentra todavía en su «reserva». Ella no tiene más que un orgasmo al año, excepto en raras ocasiones, a causa del gran calor y el fuego que arde en su interior. Así el hombre que dice: «Yo soy del Señor» no va a vaciar su cerebro a causa de su esposa o la esposa de su amigo. Ese hombre encontrará la gracia y buen favor puesto que su corazón es fuerte buscando a Dios. No temerá a la vista lo que está fuera y cuando Él le hable, él no se desviará. (Rabbi Isaac ben Yedaiah. Traducción del hebreo original por: Marc Saperstein. Decoding the Rabbis: A Thirteenth-Century Commentary on the Aggadah. Cambridge, Mass, and London, England: Harvard University Press, 1980: pp.97-98).

Debemos admitir que estamos frente a un texto realmente fascinante incluso si esto hubiese sido escrito hoy el siglo XXI. ¡Pero estamos hablando de un texto que fue escrito en siglo XIII, es decir el 1200! Este Rabino escribe sobre sexualidad en términos tan explícitos, describiendo las diferencias entre un hombre circuncidado y un hombre no circuncidado e incluso escribiendo cómo imagina él que un hombre y una mujer se satisfacen sexualmente en forma individual. Es tan increíble este texto que desde la modernidad podríamos incluso analizarlo desde un punto de vista psicológico.

Analizando este texto vemos que compara no solo la sexualidad sino la relación con Dios entre el judío que ha sido circuncidado en relación a un hombre que no ha sido circuncidado. En lo que respecta a lo sexual notamos que el texto celebra al judío por encima del cristiano puesto que realiza el acto sexual en forma rápida y eficiente. La idea central aquí es que el judío debe tener sexo rápido, disfrutar y satisfacerse sin importar lo que su esposa siente puesto que ella no es la importante aquí sino que lo más importante es que el hombre haga lo que tiene hacer y luego vaya a dedicarse a estudiar Tora o dedicarle el tiempo a lo más importante que es su vida espiritual o religiosa. Si bien el acto sexual es necesario es algo que de todos modos debe hacerse rápido para no prolongar demasiado el placer ya que según el Rabino Itzjak ben Yedidiah hacer eso es lo que lo mete a uno en problemas.

Lo más paradójico de toda esta descripción es que asume cierto estereotipo que termina siendo contrario a lo que generalmente asumimos de la sexualidad judía en relación a la sexualidad cristiana. El hombre cristiano es presentado aquí como un animal sexual con la fuerza de un caballo. Así es como este Rabino imagina a un cristiano. Mientras tanto el judío que está supuestamente siendo halagado aquí, es presentado como el amante poco afectuoso a quien no le interesa si su esposa está satisfecha sino que la misma es tratada como un objeto que está ahí solamente para satisfacerlo a él. El cristiano desde un perspectiva moderna sale mejor parado de todo este escenario: no está circuncidado y por eso puede aguantar más y hacer más feliz a la mujer permitiendo que ella llegue al orgasmo y desde la perspectiva femenina parecería ser mejor tener sexo con un cristiano que con un judío.

Y lo que es paradójico de todo esto es la presentación de este cristiano que es totalmente opuesto a la imagen tradicional que nosotros tenemos del cristianismo en general con el celibato por parte de los sacerdotes y la abstinencia sexual como un valor que está muy presente dentro del pensamiento cristiano. La visión convencional que siempre se compara con este tema es que los judíos disfrutan del sexo y los cristianos se abstienen lo más que pueden y el tema de la sexualidad para los cristianos si bien no es tabú o está prohibido hablar del tema, en términos generales es mucho más reservado. Más allá si es verdad o no que alguien podría realmente argumentar que los judíos disfrutan más del sexo que los cristianos -puesto que los judíos no le ponen ningún estigma real a la sexualidad mientras que el cristianismo si lo hace- este texto parecería contrariar ese estereotipo y dar completamente vuelta la imagen convencional. Lo que quiero decir con todo esto es que desde nuestra visión del siglo XXI y con la moral presentada en el crecimiento del feminismo, el cristiano (sexualmente hablando) termina siendo mejor que el judío a pesar que este texto está escrito con la idea ennoblecer al judío por encima del cristiano.

El texto obviamente tiene poco interés en la satisfacción sexual de la mujer y está más preocupado por el placer del hombre quien alcanza su orgasmo rápido mientras que ni si quiera importa si la mujer alguna vez disfruta de su sexualidad. La circuncisión entonces desde la perspectiva de este autor disminuye el encuentro sexual (de hecho esto es algo que Maimonides también había notado antes) y limita la sexualidad solamente a la procreación en favor de dedicar el tiempo hacia cosas más espirituales.

Por supuesto que no podemos generalizar ni al judío, ni al cristiano, ni q la sexualidad de ambos basándonos solamente en este texto. Pero lo que nos revela realmente este texto es la posibilidad de apreciar que hay diferentes puntos de vista sobre todos estos temas incluso en la edad media. Antes que definamos en una sola visión cuál es la opinión judía del sexo y cuál es la cristiana en la modernidad, este texto medieval nos revela que esa visión no siempre fue así. Lo que este texto nos ofrece entonces es el potencial de encontrar discusiones abiertas sobre la sexualidad incluso en el entorno obscuro del comentario rabínico. Es en ese sentido que nos encontramos frente a un tema que vale la pena considerar y reflexionar para superar la idea ingenua que muchos tienen que la gente del medioevo era diferente de nosotros. Hablaban abiertamente de un tema como la sexualidad que es tan preciado para nosotros como lo era para ellos.

En conclusión vemos que estos dos textos nos revelan la posibilidad y la potencialidad de introducirnos en una nueva o diferente manera de ver la cultura judía y la historia judía. Es mi deseo que presentándoles estos dos temas ustedes se sientan provocados a profundizar aún más en esta aproximación fascinante hacia la historia medieval judía.

Archivado en: Judaismo Medieval, Podcast Historia Judía Medieval, Podcasts Etiquetado como: edad media, el cristianismo, el feminismo, el rol de la mujer judía, familia judia medieval tipica, Feminismo, la mujer judia, la mujer medieval judia, mundo medieval, sexualidad judia

¿Qué son los judíos Conservadores?

18/06/2013 por Diego Edelberg 6 comentarios

 

El Judaísmo Conservador

Luego de escribir sobre los Ortodoxos y los Reformistas le toca el turno a los Conservadores.

El judaísmo Conservador se inició al igual que el Ortodoxo y Reformista en la Alemania del 1800. Los fundadores de esta corriente conocida originariamente como Histórico-Positivista, entendieron al judaísmo (igual que sus colegas Reformistas) como una evolutiva manifestación grupal de la evolutiva existencia humana. Pero a diferencia de los primeros Reformistas que fueron terriblemente radicales en su pensamiento, el grupo de los Histórico-Positivistas abrazaron fuertemente la halajá (Ley Judía) junto al carácter étnico del pueblo judío. Sin embargo tanto los componentes étnicos como los religiosos (los actos rituales) fueron comprendidos y analizados a la luz del academicismo histórico y contemporáneo. La segunda generación de este grupo transplantó sus ideales a los Estados Unidos donde el Judaísmo Conservador se convirtió en un movimiento.

 

La «Estrella» del siglo XIX

No hay dudas que el judaísmo Conservador ha sido la estrella del siglo XIX y es muy claro el porqué. Los primeros inmigrantes judíos que llegaron al continente Americano venían en su gran mayoría de Europa Oriental (Hungría, Lituania Polonia, la República Checa, Rumania, Rusia, etc.). Estos judíos querían ser modernos en el Nuevo Mundo, pero se sentían ajenos a los Templos Reformistas que no poseían la calidez y el estilo tradicional de las Sinagogas que ellos extrañaban de Europa. Además los judíos Reformistas venían en su gran mayoría de Europa Occidental (Alemania, Francia, Inglaterra, etc.) y rápidamente se habían integrado a la cultura americana. Por este motivo veían a sus hermanos de Europa Oriental como inferiores o menos sofisticados que ellos. Si bien muchos de los judíos que venían del shtetl (pequeña ciudad judía de Europa Oriental) no observaban todas las leyes judías, al menos las respetaban más que los Reformistas y no estaban dispuestos a abandonar el kashrut, la plegaria en hebreo y las regulaciones del Shabat y otras festividades.

 

El punto medio

Tanto en su filosofía, su academicismo e incluso su teología, el judaísmo Conservador se encuentra entre medio del Reformismo y la Ortodoxia. Al igual que los Ortodoxos y a diferencia de los Reformistas, los Conservadores aceptan la halajá como la expresión primaria del pueblo judío. Para ellos la halajá es una entidad viva que se adapta, cambia y evoluciona respondiendo a los diferentes desafíos históricos, geográficos e incluso políticos. Pero las decisiones finales en esta corriente no son “la conciencia individual” (como propone el Reformismo) sino el consenso de los rabinos y las instituciones centrales especializadas en Ley Judía. Esto hace que el cambio en esta corriente suceda en forma más lenta y organizada comparado con el Reformismo. Tomando un ejemplo, en el caso del feminismo la Reforma ordenó la primer mujer rabino en 1972 y al judaísmo Conservador le llevo más tiempo tomar esta decisión debido a una profunda investigación de la halajá por sus académicos y rabinos principales llegando a ordenar su primera rabino Conservador en 1985. Los Ortodoxos recién en los últimos años han logrado avanzar un poco con este mismo tema pero no falta mucho para que sea una realidad también en esta corriente (de hecho hay quienes discuten que ya ha sucedido: http://www.nci.org.uy/index.php?option=com_content&view=article&id=266:primera-mujer-rabina-ortodoxa-ordenada-en-ee-uu&catid=23:mujer-y-judaismo&Itemid=63). Curiosamente mientras escribo esto hoy salió esta nota en inglés: http://www.thedailybeast.com/articles/2013/06/17/a-historic-graduation-ceremony-for-orthodox-women.html

 

El Judaísmo Conservador y sus desafíos

Los Conservadores hoy definen sus Sinagogas, creencias y prácticas como tradicionales y modernas. En casi todas las comunidades Conservadoras las mujeres son consideradas en forma igualitaria en cuanto a la participación de los servicios religiosos. El estilo Conservador retiene el sabor tradicional en cuanto a la liturgia y el rezo pero su análisis de texto y teología están notablemente influenciados por el pensamiento moderno.

A pesar de la opinión general, ser un punto intermedio nunca es del todo fácil. Ser una posición intermedia nunca tiene la claridad y la fuerza ideológica que tiene el Reformismo o la Ortodoxia. En cualquiera de estos dos otros movimientos esta bien claro qué estamos practicando o en qué creemos. Por este motivo el judaísmo Conservador ha atravesado y sigue atravesando numerosas crisis institucionales. La primera de ellas sucedió cuando un ala más de izquierda se separó y creó la corriente Reconstruccionista. La problemática y a la vez riqueza del judaísmo Conservador es su tremenda ambigüedad. Y lo que ha surgido en los últimos años por lo tanto es una gran variedad de interpretaciones.

En los últimos años el judaísmo Conservador y en particular los rabinos Conservadores se han esforzado para articular mas claramente y forma coherente y cohesiva qué significa su posición intermedia. Pero como ustedes pueden apreciar lo que tenemos es la gran ventaja de estar en el centro y por ende poder asumir las fortalezas de cada una de las demás corrientes pero al mismo tiempo nos queda este tipo de confusión sobre ¿qué significa que el referente es la totalidad de la comunidad y quién es realmente la comunidad? ¿Qué modelo de comunidad tenemos en mente?

En los últimos años el JTSA (la Institución Central en Estados Unidos) y el Seminario Rabínico Conservador Latinoamericano son claramente instituciones mucho mas observantes y comprometidas con el judaísmo tradicional que las sinagogas y rabinos que se encuentran bajo su red. Hay una interesante situación sociológica que ha emergido de esta situación: por una lado cada congregación hace lo propio siguiendo cada rabino en forma particular mientras que la institución central y representativa del movimiento es mucho mas Conservadora.

Mi otra serie sobre el Judaísmo Moderno explora en una publicación entera el El judaísmo Conservador.

Archivado en: Educación Judía Etiquetado como: conservador, conservadores, el feminismo, Reconstruccionista

¿Qué son los judíos Ortodoxos?

11/06/2013 por Diego Edelberg 21 comentarios

 

¡Otra vez los Ortodoxos!

Quizás se sorprendan al leer otra publicación dedicada al judaísmo ortodoxo en este blog. Ya he escrito extensamente sobre esta corriente en publicaciones como El Judaísmo Ortodoxo y Tradición: ¿cambio o continuidad? Respuesta al judaísmo Ortodoxo. Pero al descubrir que los Judíos Ortodoxos son los que más tiempo y dinero invierten en Internet y justamente los mejores 19 sitios para aprender sobre Judaísmo y Tora en español están en su mayoría en manos de rabinos o seguidores de la corriente ortodoxa no puedo dejar de maravillarme nuevamente ante una de las palabras claves más utilizadas para llegar a este blog en la última semana: ‘judíos ortodoxos’.

En homenaje a esta palabra clave acá va una publicación breve para explicarles qué son los judíos ortodoxos.

 

Hasta el 1800 éramos premodernos

Tomando como referencia la historia mundial, hasta el 1800 aproximadamente todos los judíos podrían ser encapsulados en una sola categoría: premodernos. Por supuesto que había distintos tipos de judíos antes de la modernidad del modo que hay distintos tipos de judíos hoy en la modernidad. Cuando uno lee la Tora, el Talmud y la historia judía rápidamente descubre que los judíos siempre hemos estado en desacuerdo. La ridícula idea que solíamos hacer todos los mismo y pensar del mismo modo en la antigüedad es un mito. Sabemos esto porque el Gran Templo de Jerusalem fue destruido según los Rabinos por peleas internas y odio entre judíos. Peleas que existían miles de años antes que aparecieran los Reformistas, los Sionistas, los Ortodoxos, etc. De todos modos los judíos premodernos estaban básicamente diferenciados por factores geográficos y de estilo más que cualquier otra cosa. Los premodernos podían ser subdivididos en ashkenazim y sefaradim o jasidim y mitnagdim. Pero hasta el 1800 el judaísmo ortodoxo no existía.

 

Luego llegaron los Reformistas

Comenzando el 1800 algunos grupos judíos (principalmente en Alemania) comenzaron a reformar el judaísmo medieval con la idea que estaban actualizando y llevando su tradición hacia una visión más optimista y honesta enmarcada en el racionalismo y el pensamiento científico de su tiempo. Estos eran los primeros Reformistas quienes en su búsqueda de autenticidad le dijeron violentamente “adiós” al pasado y comenzaron a realizar cambios impensados. Con el paso del tiempo las siguientes generaciones fueron  repensado su estrategia y los Reformistas hoy son conscientes que el judaísmo sin mitzvot o mandamientos no es judaísmo (de todos modos la práctica de los mandamientos sigue siendo opcional dentro de una comunidad reformista y el rabino pude estar observando el kashrut pero no lo impone en los miembros de la comunidad…en consecuencia el tema no se ha modificado del todo).

 

Y no tardó en aparecer la respuesta Ortodoxa

Aquellos judíos que no estaban de acuerdo con todos estos cambios dentro de la tradición fueron los primeros “Ortodoxos”. A pesar que muchos judíos Ortodoxos de aquel entonces y de hoy decían y dicen que el nombre en si no los representa o incluso no significa realmente nada, el mismo Samson Raphael Hirsch (uno de los más grandes Rabinos ortodoxos) al establecer en 1886 una alianza de congregaciones judías en Europa que compartían los mismos ideales la nombró “Freie Vereinigung für die Interessen des Orthodoxen Judentums” es decir “Unión Libre para los Intereses del Judaísmo Ortodoxo”. Por lo tanto terminó él mismo asumiendo esta denominación.

 

La Ortodoxia es en cuanto a su reacción a la Modernidad

Hasta el día de hoy la Ortodoxia judía es la corriente que más resiste al cambio y al efecto de la modernidad. Apoyándose en la creencia ferviente que Dios literalmente dictó toda la Tora letra por letra a Moisés ninguna ley puede ser descartada incluso si hiere nuestras sensibilidades modernas. Un ejemplo concreto de esto es el feminismo y la reciente ordenación de mujeres como “rabinas ortodoxas” que en realidad no son tales pero consideradas como si lo fueran (se que suena medio extraño pero es así. Pueden leer más en inglés siguiendo este enlace http://www.tabletmag.com/jewish-life-and-religion/134369/orthodox-women-ordained?all=1). El fenómeno más curioso que se ha dado con este tema es que muchos cambios iniciales que son criticados en otras corrientes y que comienzan con el Reformismo o el Reconstruccionismo (ambos movimientos fueron los primeros en ordenar mujeres como rabinas e inventar el Bat Mitzva) terminan salpicando e influenciando décadas más tarde a la corriente Ortodoxa.

 

Un judío dos opiniones

Hay muchas clases de judíos ortodoxos. Algunos no reconocen el Estado de Israel (¡a pesar que viven ahí!) bajo el argumento que el mismo fue una consecuencia humana y no divina. Por el contrario a esta postura hay otros que se llaman “Ortodoxia Moderna” y hacen un gran esfuerzo para intentar armonizar las tradiciones ancestrales con las perspectivas modernas. Pero si las ideas modernas entran en conflicto con las enseñanzas tradicionales entonces la tradición cobra prioridad. Nuevamente y tomando el ejemplo del feminismo, para muchas mujeres ortodoxas sigue siendo terriblemente ofensivo la idea que su presencia no cuenta frente a Dios para conformar un minian, es decir un mínimo de diez adultos necesarios para realizar ciertas prácticas judías. Toda la base de la argumentación Ortodoxa para contestar preguntas, vivir su teología y pensar su práctica cotidiana se apoya en los textos de la literatura rabínica.

 

Un corazón con muchas habitaciones

Como siempre digo en este blog, la idea no es decir si la Ortodoxia judía es buena o mala, correcta o incorrecta. Tampoco quiero sugerir que los diferentes movimientos judíos son unos mejores o peores que los otros ni que uno de ellos es “verdadero” y los demás son falsos o distorsionados. No creo que exista algo así en el esfuerzo sincero de todos los judíos por encontrar sentido a sus vidas. Si no fuera así tampoco entendería porque Dios permite la multiplicidad de opiniones en el judaísmo y estando Dios a cargo del devenir histórico parecería que está permitido que existan distintas maneras de entender lo judío. Dios no quiere un solo modo de ser, un solo modo de entender la vida, una sola manera de leer la Tora, una sola manera de entender la tradición judía e incluso una sola manera de entender lo que quiere porque si fuera así no nos hubiese creando tan diferentes los unos a los otros. Lo que estamos haciendo es intentar comprender las aproximaciones judías a la modernidad.

Archivado en: Educación Judía Etiquetado como: el feminismo, Feminismo, hirsch, la modernidad, ortodoxo, reformista

¿Cuál es la diferencia entre Ortodoxo, Conservador, Reformista y Jabad Luvabitch?

03/02/2012 por Diego Edelberg 33 comentarios

 

Primero y Principal

Para poder entender las diferencias entre estas tres diferentes aproximaciones y Jabad Luvabitch hacia la tradición judía tenemos primero que entender dos aspectos que si bien pueden resultar obvios para muchos de ustedes deben quedar en claro desde un comienzo.

Estos dos aspectos son: (1) la historia judía no sucede aislada del resto de la historia mundial y en consecuencia (2) lo que sucede en la historia mundial afecta la historia judía.

El hecho irrefutable que la historia judía no sucede aislada del resto de la historia mundial significa que uno no puede realmente comprender el judaísmo si desconoce totalmente lo que fue pasando en la historia de la humanidad. Por ejemplo, uno no puede entender en profundidad qué es Jánuca si no sabe quién fue Alejandro Magno. Tampoco puede entender el Talmud en profundidad si no sabe nada de la historia de Babilonia en donde fue escrito. Menos puede uno entender a Rashi o Maimonides si ignora por completo qué pasaba en la Edad Media (y especialmente donde ellos vivían) para comprender así qué cosas influenciaban el modo en que ellos leían la Tora y el Talmud. Tampoco se puede comprender por qué surgió el Sionismo sin saber nada de los Nacionalismos Modernos. Y aunque todo esto puede ser evidente para muchos de ustedes es para mí fundamental repetirlo y aclararlo una y otra vez a lo largo de todas mis publicaciones.

Si reconocemos honestamente el impacto que tienen en nuestras vidas cosas tan remotas como el surgimiento de Internet, la telefonía celular, el aborto, las problemáticas actuales en la tierra de Israel, los matrimonios interreligiosos, los casamientos homosexuales, las crisis económicas del sistema capitalista, el feminismo, los problemas sobre ecología y medio ambiente, la crisis nuclear en Iran, etc. claramente entendemos que el modo en que leemos la Tora hoy y lo que significa ser judíos hoy no tiene mucho que ver con lo que sentía o como leía la Tora un judío hace 1000 años.

El hecho irrefutable que lo que sucede en la historia mundial afecta la historia judía significa que el judaísmo que Moisés practicaba no era exactamente el mismo que Rabbi Akiva practicaba luego de la destrucción del Gran Templo cuando los Cohanim se quedaron sin empleo (ya que vivían para el Templo y el mismo fue destruído) y la palabra “Rabino” ni siquiera existía en el vocabulario hebreo. Moisés jamás hubiese entendido si un hebreo le hubiera preguntado en medio del desierto “¿qué ponemos en la keara durante la noche del Seder?”. Por otro lado el judaísmo que practicaba Maimonides en el siglo XII en la España Medieval bajo dominación islámica no era exactamente el mismo que practicaba Rabbi Akiva quien jamás escucho hablar de una religión llamada Islam. Ni siquiera nosotros hoy en la modernidad practicamos el mismo judaísmo que Maimonides practicaba ya que el jamás se imaginó que surgiría un movimiento Ortodoxo, Reformista, Conservador, Jabad Luvabitch o incluso y aún más complejo de explicar, algo llamado “Sionismo”. Claramente lo que sucede en la historia mundial afecta la historia judía.

En el tiempo bíblico por ejemplo, la esclavitud era aceptada. En la época en que los rabinos terminaban de escribir el Talmud la esclavitud era aceptada. Hasta el siglo XVIII entre muchos judíos formados y bien educados la esclavitud era algo aceptado. Hoy no existe ninguna corriente judía que defienda la esclavitud. Dejar de tener esclavos fue un proceso social que sucedió en la conciencia humana mundial y afectó la historia judía.

Quitar los instrumentos musicales de los servicios religiosos judíos fue algo nuevo en la historia que sucedió después de la destrucción del Gran Templo ya que es bien sabido y aceptado por la mayoría de los judíos que los Salmos eran cantados y acompañados con instrumentos musicales dentro del Gran Templo en Shabbat y otras festividades. Si uno iba en Shabbat al Gran Templo en Jerusalem uno escuchaba instrumentos musicales. Pero debido a que los instrumentos traen alegría según los Rabinos (debo confesarles que hay ciertos obras orquestales y sinfónicas que me traen una tristeza infernal y me hacen emocionar hasta las lagrimas), los Rabinos mismos decidieron cambiar la tradición y dejar de usar instrumentos en Shabbat para recordar la amargura de haber perdido el Gran Templo. Más tarde esto derivó en las leyes con respecto a la reparación de instrumentos en Shabbat que claramente no se discutían cuando los instrumentos eran tocados en el Gran Templo en Jerusalem. Pero dejar de utilizar instrumentos musicales en Shabbat fue una decisión que cambió la forma en la cual tradicionalmente se practicaba el judaísmo anterior a la destrucción del Gran Templo. Claramente estos dos ejemplos entre los miles que uno podría nombrar dejan en claro que lo que sucede en la historia mundial afecta la historia judía.

Podríamos resumir estos dos aspectos contemplando que cualquier ser humano aceptaría en forma consciente que la historia afecta a la tradición. Siempre lo ha hecho y siempre lo hará.

Teniendo en claro estos dos aspectos tenemos que entender ahora un proceso histórico llamado “Modernidad” que sucedió y cambió la historia de la humanidad y con ella la historia  judía. La importancia de comprender qué es la Modernidad nos permitirá entender cuál es la diferencia entre Ortodoxo, Conservador, Reformista y Jabad Luvabitch.

 

El impacto de la Modernidad en el judaísmo

La Modernidad se refiere a un período histórico marcado principalmente por el fin de un sistema social llamado feudalismo (un sistema piramidal en el cual uno era rey o campesino desde la cuna a la tumba) hacia el capitalismo, la industrialización, la secularización, la racionalización, la creación del Estado o Nación modernos, sus Instituciones y las Constituciones de los países tal cual los conocemos en la actualidad. En definitiva un mundo completamente opuesto al Medieval.

En la historia judía fechamos la Modernidad entre los años 1750 hasta la actualidad (muchos autores ya hablan de un Posmodernismo también en el judaísmo y lo ubican luego de la Shoá (Holocausto) y el nacimiento del Estado de Israel Moderno). Si 1750 marca el inicio de la Modernidad, el período histórico que va de 1492 a 1750 es considerado hoy la «Pre-Modernidad»  (también llamado «Modernidad Temprana«). Durante la «Modernidad Temprana» suceden ciertos eventos muy particulares que demuestran que ya no estamos en la Edad Media (aquel período dominado por el feudalismo) pero tampoco estamos en la Modernidad plena.

Lo más importante que debemos entender sobre la Modernidad es que como cualquier suceso histórico no es un evento sino un proceso. Esto significa que no sucedió una sola cosa que cambió todo de un día para otro sino que sucedieron múltiples cosas a lo largo de varios años que fueron cambiando la realidad histórica mundial y de los judíos.

En palabras mas simples, no es que un judío viviendo en 1492 al ser expulsado de España se dijo a sí mismo “¡oh! ¡he entrando en la Modernidad Temprana!” sino que como describiré a continuación, a partir de 1492 comienzan a suceder diversos procesos que son la consecuencia de lo que posteriormente y en forma retrospectiva los historiadores llamarán “Modernidad” y «Modernidad Temprana».

Es real que las corrientes Ortodoxa, Conservadora, Reformista e incluso Jabad Luvabitch se consolidan y oficializan en el siglo XIX. Pero es un error gravísimo argumentar que es sólo en el siglo XIX cuando todo cambia en la historia judía. Es muy mediocre creer que debido a la Revolución Francesa de 1789 todos los judíos son emancipados y al recibir los mismos derechos y obligaciones que los demas seres humanos dejaron de practicar el judaísmo de la noche a la mañana. Mucha gente tiene esta idea ingenua que hasta el siglo XIX todos los judíos del mundo eran observantes de la Ley Judía y que comenzando el 1800 dejaron de practicar el judaísmo por culpa de la emancipación y el pensamiento racional moderno. Los cambios que suceden en el siglo XIX son la consecuencia de un proceso que claramente comienza en el siglo XVI.

Y si bien suceden múltiples procesos que cambian el devenir histórico, voy a mencionar cinco experiencias anteriores al siglo XIX que tendrán un impacto fundamental en la creación de las diferentes corrientes judías modernas.

Sin ser exclusivas, las cinco experiencias judías determinantes son:

 

  • La expulsión de los judíos de España en 1492 dando comienzo a una movilidad geográfica acelerada que conduce a mayores contactos entre judíos con otros judíos de diferentes trasfondos, tradiciones e incluso idiomas y también entre judíos y no judíos. Al conocer más de cerca a otros judíos de otras latitudes los judíos mismos descubren no solo las similitudes sino las diferencias abismales entre los unos y los otros tomando conciencia que están más dispersos de lo que creían siguiendo cada grupo sus propias tradiciones particulares. Al mencionar esto me refiero a la movilidad de un gran número de emigrantes expulsados de sus lugares de origen siendo obligados a buscar refugio en nuevos y extraños entornos siendo ésta una condición especialmente notable en los siglos XVI y XVII pero no tanto en el siglo XVIII. También me refiero a la movilidad de las personas (especialmente las élites secundarias, los eruditos itinerantes, libreros, vendedores ambulantes, intelectuales inquietos) que comienzan a moverse en forma constante por casi todas las comunidades judías de Europa.

 

  • El surgimiento de un sentido de cohesión comunitaria a través de todos los nuevos asentamientos judíos llegando a un punto culminante en el Consejo extraordinario de “Las Cuatro Tierras”: un organismo central de la autoridad judía en Polonia desde 1580 hasta 1764 compuesto por setenta delegados de comunidades locales que se reunían para discutir los impuestos y otros temas importantes para la comunidad judía ( mas información -en inglés-). Tales estructuras comunales a menudo revelan una tendencia sorprendente: el creciente deterioro de la autoridad rabínica y el creciente poder de las oligarquías judías laicas. Las variaciones locales deben ser cuidadosamente observadas en estos casos.

 

  • Una explosión de conocimiento provocada no solo por la invención de la Imprenta y la publicación de libros como una nueva tecnología en la historia sino también por otros factores como el creciente interés en los libros judíos por parte de los lectores cristianos junto a un programa ampliado de estudios judaicos y la entrada visible de las elites judías en las Universidades seculares. Esta transformación, más que todas las demás, parece ser constante durante todo el período Moderno anterior al siglo XIX y tiene que ser vista en relación con los factores de movilidad y mezclas sociales ya mencionados anteriormente.

 

  • Una crisis en la autoridad rabínica engendrada por muchos factores (incluyendo los tres anteriores mencionados) y por el fenómeno de los judíos conversos, el mesianismo y el impacto del filósofo judío Baruj Spinoza demostrando que los ideales de la Modernidad ya no son compatibles con los del judaísmo tradicional heredado desde la destrucción del Gran Templo y la Edad Media. Mientras que la crisis de la autoridad rabínica se manifiesta durante todo el período Moderno comenzando en el siglo XVI, la misma se hace más aguda a finales del siglo XVII y XVIII dejando su marca en la mayoría de las comunidades judías. Justamente esta crisis precipita una contra-reacción por parte del establishment rabínico (especialmente en Amsterdam) que da comienzo al surgimiento de una especie de frente “ortodoxo” anterior al siglo XIX.

 

  • El deterioro de las identidades religiosas (lo cual es un factor íntimamente relacionado con el punto anterior) haciéndose prominente esta experiencia en los siglos XVII y XVIII. Me refiero específicamente a la aparición de los judíos conversos y sus intentos de volver a entrar en la comunidad judía principalmente en Amsterdam y Hamburgo. Simultáneamente los cruces de los seguidores judíos de Shavetai Tzvi con el islam (Dönmeh -en inglés) y el cristianismo (Jacob Frank) junto a aquellos judíos convertidos al cristianismo en sus propias búsquedas de autenticidad cristiana. Dada la gran red de comerciantes conversos y mesiánicos (conectados desde Amsterdam, Cracovia y Praga) la definición de judaísmo, cristianismo y su relación con las demás religiones es sin duda una experiencia tan importante como las demás para definir la Modernidad judía anterior al siglo XIX.

 

Con todo este panorama histórico cuando llegamos finalmente al siglo XIX notamos que los judíos que crearon las tres diferentes corrientes no exclamaron “las cosas están cambiando” sino que lo que dijeron realmente fue “las cosas han cambiado”.

La mayoría de los judíos ya en el siglo XIX no leían hebreo, estaban en su gran mayoría asimilados e incluso muchos de ellos se habían convertido al cristianismo para ocupar cargos Universitarios o puestos de trabajo; otros se habían delirado siguiendo los mesianismos de Shavetai Tzvi y Jacob Frank entre los siglos XVII y XVIII haciendo estragos en la comunidad judía. Definitivamente cuando finalmente llegamos al siglo XIX todo lo sucedido desde el siglo XVI hace implosión cambiando radicalmente la manera en la cual el judaísmo es entendido y practicado hasta la actualidad.

Es muy fácil y tentador culpar a la ciencia, la emancipación, la secularización, las filosofías modernas, internet, la televisión, la ostentación del cuerpo y la relativización de valores y tradiciones -haciendo que todas las narrativas o textos sean válidos según las perspectivas individuales- como enemigos y causantes del eclipse del judaísmo en la modernidad. Es más cómodo señalar con el dedo algo que esta afuera como responsable de lo que nos sucede dentro. Pero por algún motivo surgió la Reforma, la Ortodoxia, el Conservadurismo, el Jasidísmo y todos los demás movimientos judíos y esto hay que dejarlo en claro desde el comienzo y es que el judaísmo tradicional heredado desde la destrucción del Gran Templo y la Edad Media no estaba respondiendo a los desafíos de la Modernidad. El judaísmo tradicional ya no estaba siendo significativo frente a todo lo que estaba sucediendo a partir del siglo XVI. Y este es el motivo por el cual es tan importante entender la Modernidad ya que el judaísmo actual en todas sus vertientes desde la Ultra-Ortodoxia hasta el Reformismo es una respuesta a la Modernidad. Anterior a la Modernidad no existían todos estos grupos y nombres.

 

3 Rabinos y 3 Interpretaciones

Solo comprendiendo todo lo descripto hasta aquí podemos entender a los tres grandes Rabinos alemanes que se preguntaron en el siglo XIX y frente a todos los desafíos de la Modernidad: ¿qué hacemos para mantener viva la tradición judía y no perder a toda esta gente que ya no encuentra sentido en el judaísmo?

 

Reformistas

El primero de ellos, un hombre llamado Abraham Geiger, propuso Reformar el judaísmo del mismo modo que los primeros Rabinos lo habían hecho luego de la destrucción del Gran Templo.

Según describe Geiger luego de la destrucción del Gran Templo un grupo de judíos que pasaron a llamarse con el tiempo “Maestros” (es decir Rab o Rabino en español)  se convirtieron hasta la actualidad en los líderes de la continuidad y la comunidad judía creando un sistema alternativo al bíblico enfocado en la plegaria, rezo o tefila en lugar del sacrificio de animales en un altar.

Para comprender esto debemos entender que la Tora nos habla entre tantos individuos de 2 personajes centrales: los Kohanim o Sacerdotes y los Reyes. Pero si uno lee toda la Tora o incluso el TaNaJ, es decir la Biblia Hebrea, en ningún momento se menciona a los Rabinos ni a la figura rabínica. Por lo tanto uno podría preguntarse ¿de dónde surgen los Rabinos? ¿Cuándo surgen los Rabinos? ¿Por qué surgen? y  ¿para qué surgen?

Y la respuesta de Geiger es que cuando el Templo es destruido y los judíos son expulsados de la tierra de Israel estas dos funciones desaparecen: los Kohanim o Sacerdotes vivían para el Templo y cuando el mismo es destruido este grupo ya no tiene nada para hacer. Por otro lado esta claro que un Rey sin monarquía o tierra no tiene mucho sobre que reinar. En ese momento crítico de la historia un grupo de judíos a quien llamamos «prushim» o «fariseos» y que posteriormente serán llamados Rabinos, fueron los responsables de la supervivencia del judaísmo hasta la actualidad reemplazando el poder central del linaje de la casta sacerdotal por la sabiduría del conocimiento de la Ley judía. En pocas palabras hicieron 3 cambios espectaculares que aseguraron la continuidad y supervivencia del judaísmo: (1) suplantaron el sistema de sacrificios animales por uno de plegarias que se remite a dichos sacrificios, (2) reemplazaron la noción de liderazgo de la comunidad basado en un linaje correspondiente a una casta sacerdotal hereditaria por otro en el cual el conocimiento o la sabiduría lo hace a uno líder del grupo creando así el concepto de Rabino o Maestro y (3) democratizaron las practicas diciendo que lo que solo hacia el Sumo Sacerdote o Kohen Gadol ahora lo reinterpretamos en las plegarias y todos deben “hacerse sacerdotes”. Cualquiera que alcance una sabiduría que otros rabinos consideran digna, esa persona es llamada también rabino de acuerdo a lo que juzgan otros colegas suyos.

Al llegar a esta comprensión sobre los fariseos o Rabinos, Geiger comenzó a argumentar justamente que los Rabinos eran judíos innovadores. No eran rígidos en sus posturas y comprensiones del judaísmo sino radicales y revolucionarios que intentaban ajustar y reformular el judaísmo de tal modo que pudiera respirar un nuevo aire haciéndolo significativo para aquellos que padecían la destrucción y desintegración de su pueblo con el fin del sistema de sacrificios de animales en el Templo y el nuevo gobierno ahora bajo la ocupación Griega y posteriormente Romana.

Para Geiger, la noción que los fariseos eran revolucionarios que lograron re-acomodar y darle un renovado sentido a su tradición de acuerdo a los desafíos de su tiempo y las necesidades espirituales de su propia comunidad estaba claramente relacionado con el presente que él y los judíos de su tiempo vivían.

Sin extendernos demasiado podríamos decir que para Geiger y los primeros Reformistas  la moral y la ética que enseñaba el judaísmo era eterna y no debía cambiarse. Pero las mitzvot si debían modificarse si ya no eran sensibles a los judíos del siglo XIX y cada judío debía optar ahora por cuenta propia que mitzvot quería observar y cuales no. Estas posturas han cambiado en la actualidad y los Reformistas actuales han lentamente comenzado a «reformar» su entendimiento y estrategias y en consecuencia la observancia de mitzvot irracionales (comer kasher, ponerse tefilín, etc.) están siendo nuevamente observadas por este grupo.

 

Ortodoxos

En respuesta a esta postura un segundo hombre llamado Samson Raphael Hirsch coincidió con Geiger en que los judíos debían sumarse a las sociedades modernas abrazando los ideales de la Modernidad pero exclamó enfáticamente que no debían abandonar el legado tradicional judío ni la practica de mitzvot. Si bien no se hizo llamar Ortodoxo, al establecer en 1886 una alianza de congregaciones judías en Europa que compartían los mismos ideales Hirsch la nombró “Freie Vereinigung für die Interessen des Orthodoxen Judentums” es decir “Unión Libre para los Intereses del Judaísmo Ortodoxo” asumiendo él mismo dicho nombre para su comprensión del judaísmo en la Modernidad.

 

Conservadores

El tercer hombre fue Zejarias Frankel (quien inspiró la creación del Movimiento Conservador) declarando que la Comunidad Judía como un todo debía ser la autoridad final que decidiría y determinaría qué observamos como pueblo y qué no. Para los Conservadores la Comunidad era realmente la que debía guiarnos (por supuesto que las Leyes Judías serían debatidas solamente por un conjunto de Rabinos expertos en la Ley y no por toda la Comunidad). Pero el judaísmo Conservador (al igual que el Reformista) dejaba en claro que el judaísmo actual y que se practicaba en la Modernidad ya no era el judaísmo literal que leíamos en la Tora sino un conjunto de reglas que habían sido creadas a partir de un proceso interpretativo de la Tora y de lo que se hacía en el Gran Templo. Estas nuevas reglas habían sido establecidas por un grupo de judíos que con el tiempo pasaron a llamarse Rabinos los cuales recrearon la tradición judía luego de la destrucción del Gran Templo en Jerusalem para poder darle así continuidad a dicha tradición. En otras palabras para los judíos Conservadores (nuevamente al igual que los Reformistas) el judaísmo original, primigenio y tradicional tal cual lo leíamos en la Tora ya no existía mas. Ya no habían Kohanim (Sacerdotes), ni Reyes, ni Gran Templo, ni seguíamos matando animales. Para los Conservadores lo que hacíamos y llamábamos judaísmo era otra cosa. Era una recreación de un grupo llamados Rabinos quienes tuvieron que adaptar el judaísmo original hacia un estadio diferente al Bíblico y lo lograron ganando el consenso de la gente. Es decir que otra manera de describir lo que la Comunidad como un todo hacía o el criterio de acciones que definía a los judíos como grupo eran de hecho las costumbres que estos rabinos habían introducido al interpretar el texto revelado de la Tora mucho más que las leyes literales que de ahí leíamos sobre el complejo sistema de sacrificios de animales en un altar y en un lugar específico. La diferencia central entre los Conservadores y los Reformistas era que los primeros Reformistas no solo eran más radicales y querían cambiar casi todo sino que además creían que cada judío en forma individual debía elegir en forma adulta y responsable qué cumplir y que no cumplir del judaísmo. Los Conservadores seguían teniendo una sensibilidad por las mitzvot y ademas creían que no se podía dejar en las manos de cada judío elegir sino que había que mirar a la totalidad de la Comunidad y trabajar en forma corporativa.

 

Relevancia de lo que los judíos han creído

En síntesis la diferencia central entre Reformista, Conservador y Ortodoxo es su relación con lo que hemos definido como “Modernidad” y los desafíos que ésta ha presentado no solo a los judíos sino a toda la humanidad. El desafío principal que la Modernidad trajo es hacernos consciente que el “ser-humano” implica “ser–intérprete” . Eso significa que la Modernidad hizo consciente al ser-humano que cada vez que experimenta o lee algo lo hace según su propia historia personal, su propia tradición, de acuerdo a cómo fue educado, de acuerdo a cómo le dijeron que debía entender las cosas, de acuerdo a lo que le dijeron qué es La Verdad, de acuerdo a su propio bagaje histórico, su propio esquema de referencia, sus propios prejuicios y expectativas. En consecuencia para el ser humano Moderno «él o ella» son finalmente más importantes que el «texto» mismo a la hora de entender lo que el texto dice y definitivamente “no vemos las cosas como son sino como somos nosotros”. La pregunta crucial es cómo leemos o entendemos de acuerdo a nuestras propias experiencias de vida. Éste es el gran énfasis en la filosofía de  Spinoza quien nos hace conscientes que nunca más podremos tener una lectura objetiva sino subjetiva de la vida y de los textos que leemos de acuerdo a nuestras propias experiencias de vida.

La gran diferencia radica en cómo decidimos posicionarnos frente a los textos, los mandatos heredados y la tradición. Al fin de cuentas debemos tomar una decisión: ¿decidimos que «tradición es aquello que no cambia» o «tradición es una palabra que significa cambio constante»? El desafio está en que la historia, como vimos al comienzo, cambia constantemente el devenir y la tradición. ¿Dejamos que la mente libremente explore o de antemano definimos qué es la Verdad (en este caso sería la Tora, la Halajá, el judaísmo o nuestra manera de entender el judaísmo) y ajustamos todo lo demás para que encaje con nuestra definición pre-establecida? Esta es en esencia la cuestión que separa las diferentes aproximaciones judías en la Modernidad. Si pre-establecemos que nosotros debemos ajustarnos a los textos entonces veremos el mundo y nuestra vida de una forma. Si pre-establecemos que los textos están sujetos a quien los lee e interpreta entonces veremos el mundo y nuestra vida de otra forma diferente. Esta es la elección que se nos da.

De todos modos la fe y el judaísmo no es ciencia exacta y hay diferentes niveles de observancia entre cada uno de los judíos y entre las distintas generaciones de rabinos y seguidores de cada una de las tres corrientes. En los casi 200 años de historia que han pasado desde que se crearon estas tres aproximaciones judías hasta la actualidad las tres corrientes han cambiado sustancialmente. Incluso hemos llegado a una situación actual en la que muchos judíos pueden creer y practicar una combinación de las tres corrientes. Es decir que un judío en la actualidad puede cumplir con todas las Leyes de la Tora y así y todo tener una aproximación Moderna hacia la tradición judía enfrentando la Tora a lecturas históricas y antropológicas considerando la opinión de académicos modernos tanto judíos como no judíos. Por el contrario podemos encontrar judíos que no cumplen con todas las Leyes de la Tora pero se sienten a gusto leyendo exégesis e interpretaciones de judíos medievales o pre-modernos y creen literalmente que el texto fue dictado “letra a letra” por Dios a Moisés.

En la actualidad hay más tolerancia en las contradicciones entre “lo que se cree” y “lo que se practica” aunque uno debe entender que el judaísmo no es algo uno hace en soledad y en consecuencia, de acuerdo al grupo, movimiento, corriente o Sinagoga que decide uno sumarse tendrá que tolerar aquello con lo que no coincide pero si lo hace la mayoría. Si la relación entre lo que esta dispuesto a tolerar se hace insostenible simplemente deberá cambiar de grupo y tratar de encontrar uno con el cual se sienta más a gusto.

Pero como ya mencionamos la división en las distintas corrientes se basa principalmente en cómo se relacionan con la Modernidad y sus ideales. En la actualidad hay judíos Ortodoxos como Conservadores y Reformistas que: (a) incluyen la modernidad como algo intrínseco, otros (b) toleran la modernidad porque no les queda otra opción y otros (c) la rechazan de forma plena y la consideran el gran enemigo del judaísmo.

 

Contrastes entre las tres corrientes (O, C y R)

Desarrollado por David Steinberg

 

Origen

Ortodoxia: producto de una redefinición del judaísmo tradicional frente a los desafíos de la Modernidad evitando lo máximo posible dichos ideales y en reacción al Judaísmo Reformista.

Conservador: producto de una redefinición del judaísmo tradicional frente a los desafíos de la Modernidad contemplando ahora el paradigma científico y académico como parte integral de la tradición y al igual que la Ortodoxia en reacción al Judaísmo Reformista.

Reformista: producto de una transformación radical del judaísmo tradicional confrontándolo con el Cristianismo y enfatizando la importancia de la emancipación política y social dentro del mundo occidental moderno.

 

Tora (Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio)

O: dictada letra a letra en su totalidad por Dios a Moisés en la doctrina conocida como Tora min hashamaim (Tora proveniente de los cielos).

C: inspirada en un encuentro inexplicable con Dios pero percibida y escrita por uno o varios autores. Ciertas partes pueden ser más “divinas” que otras como por ejemplo los 10 Mandamientos en contraposición a la demanda de exterminar a los cananeos.

R: igual que los conservadores

 

Relevancia de la Tora

O: compromiso total con todos los aspectos de la existencia humana excepto cuando entra en conflicto con la Ley civil (doctrina de dina demaljuta dina).

C: compromiso total con todos los aspectos de la existencia humana incluyendo las interpretaciones recientes de Rabinos Conservadores excepto cuando entran en conflicto con la Ley civil (doctrina de dina demaljuta dina).

R: considerada la fuente de la historia judía y la historia de la relación del pueblo de Israel con Dios. Solo los aspectos éticos son consideramos en forma absoluta aunque otros elementos pueden ser apropiados por los individuos si los encuentran significativos para sus propias vidas.

 

Estudio de la Tora

O: confinada a los comentarios tradicionales pre-modernos excepto en las ilustraciones que pueden ser tomadas de la arqueología. No es aceptada la Crítica Moderna (CM) con preguntas como (a) ¿es posible que el texto se haya corrompido de alguna manera debido a algún error o confusión? (b) ¿cómo se materializo o se escribió el texto? (c) ¿cuándo se decidió qué libros iban a formar parte de la tradición o no? ¿Por qué el libro de los Macabeos quedó afuera? etc.

C: comentarios tradicionales y CM

R: igual que los Conservadores

 

Estudio de los Profetas y otras Escrituras (el TaNaj o Biblia Hebrea mas allá de los primeros 5 libros)

O: exceptuando corrientes Neo-Ortodoxas casi no son estudiados. Partes que se conocen en profundidad son aquellas conectadas con la liturgia, por ejemplo las Haftarot, Salmos, Ester, El Cantar de los Cantares y Lamentaciones. Se leen utilizando comentarios pre-modernos (principalmente Rashi) y no se utiliza la Crítica Moderna (ver arriba).

C: comentarios tradicionales y CM

R: igual que los Conservadores

 

Estudio del Talmud

O: prácticamente el único tema serio de estudio utilizando solamente comentarios pre-modernos. Es estudiado generalmente solo por hombres. Se prohibe la Crítica Moderna debido a que su uso conllevaría a disturbios psicológicos con preguntas como: si Jánuca sucedió después de la entrega de la Tora ¿cómo entendemos las bendiciones creadas por los Rabinos diciendo que Dios mismo ordenó encender las velas de Jánuca cuando luego de los Profetas Dios ya no se comunicaba con seres humanos?

C: comentarios tradicionales y CM. El Talmud es estudiado mucho más por los rabinos que por los miembros de la comunidad.

R: igual que los Conservadores aunque los miembros de la comunidad casi nunca estudian Talmud si no es a través de una clase explicativa por parte de los Rabinos.

 

Creencias sobre el origen de la Ley (Halaja)

O: los métodos para comprender la Halajá surgen de la Ley Oral (Mishná, Guemará, códigos, comentarios sobre los códigos, etc.) y esta Ley fue dada a Moisés en el monte Sinaí por Dios junto con la Tora Escrita. Por lo tanto, la Halajá es irrefutable, incambiable y divina.

C: la Ley Oral surgió bajo la influencia divina, a través de factores tales como: (a) interpretaciones y desarrollos dentro de la Tora, (b) las decisiones y la influencia de los rabinos, (c) las costumbres populares, (d) las presiones económicas, (e) otras influencias culturales y religiosas ajenas al judaísmo. Se basa en la fe influenciada por la investigación científica moderna.

R: igual que los Conservadores

 

Derivaciones y comprensiones sobre la Ley (Halajá)

O: principalmente se utilizan los códigos legales tradicionales y pre-modernos. Como libro de referencia principal se utiliza curiosamente un libro escrito en la Modernidad titulado Shuljan Aruj. Se utilizan también comentarios sobre los códigos legales principalmente Mishna Berura y responsas rabínicas conocidas como sheilot uteshuvot (preguntas y respuestas). Se le da menos importancia a las decisiones legales de los rabinos modernos (debido a que se sigue la doctrina que plantea que “cuanto más nos alejamos de la revelación en Sinaí menos entendemos la Tora, la Ley y la revelación). Tendencia a tomar la decisión más estricta posible para evitar confrontaciones con grupos Haredí (Ultra-Ortodoxos). Poca disposición a moldear la Halajá a los cambios modernos tanto materiales como ideológicos (ejemplo como la utilización de micrófonos en Shabbat que no existían hasta hace 100 años o el impacto del feminismo y las mujeres ortodoxas queriendo leer también el Talmud).

C: diversas fuentes: (a) códigos tradicionales pre-modernos, sus comentarios y sus responsas; (b) sensibilidad a los cambios históricos, la razón del por qué sucedieron dichos cambios y su impacto en el pensamiento y la práctica judía a través del tiempo; (c) divisiones entre mitzvot (preceptos) más o menos importantes; (e) actitudes positivas con respecto a moldear la Halajá (Ley) con las realidades modernas tanto materiales como ideológicas.

R: no acepta la Halajá como algo revelado por Dios sino como algo creado por hombres a partir de un “encuentro inexplicable” con Dios. La Ley y el ritual es entendida como un conjunto de prácticas que otorgan un sentido de identidad y pertenencia pero no necesariamente se cree que si uno no cumple con dicha Ley Dios va a castigarlo. Si uno quiere observar todas las leyes es bien recibido pero tiene que comprender que no todos los miembros de su comunidad observarán las mismas prácticas.

 

Importancia de la Halaja (Ley Judía)

O: compromiso total con todos los aspectos de la existencia humana excepto cuando entra en conflicto con la Ley civil (doctrina de dina demaljuta dina). Aceptación del concepto de “libre albedrío” (cada judío puede elegir libremente si quiere obedecer los preceptos y sublimarse a una Ley mayor que la propia voluntad o por el contrario ser un transgresor y desviarse de la Ley cometiendo un pecado del que puede redimirse en plegaria y acciones).

C: igual que los Ortodoxos

R: considerada una fuente de la cual los judíos pueden individualmente extraer ceremonias y rituales heredados que pueden sentir como significativos. Si bien no cumplir con la Ley se considera litúrgica y teológicamente una transgresión y un pecado, no se cree que si uno no cumple o transgrede la Ley será penalizado. En consecuencia no se cree en la observancia de mitzvot con el fin ulterior de recibir recompensas y evitar castigos sino que se practican las mitzvot por decisión personal y por amor a la mitzva misma.

 

Observancia actual de la Halaja

O: entre los observantes muy elevada.

C: entre los rabinos elevada. Entre los miembros de la comunidad muy baja.

R: al no aceptar la naturaleza “divina” de la Halaja este no es un tema central. De todos modos los rabinos tienden a observar mucho más que sus miembros pero muy poco comparado con rabinos Conservadores u Ortodoxos

 

Dedicación al academicismo judío

O: muy poca dedicación y peligrosa debido a las contradicciones que puede presentar para el sistema.

C: muy elevada siendo algo constitutivo del movimiento.

R: igual que los Conservadores

 

Actitudes frente a nociones sobre “Pueblo Elegido” y el Sionismo

O: se cree que los judíos son “elegidos” (no mejores ni peores) para cumplir una función específica en la historia del Universo. Las actitudes con respecto al Sionismo varían drásticamente. Es la única corriente que posee un ala que se declara Anti-Sionismo.

C: al igual que los ortodoxos también se acepta que los judíos son “elegidos” (no mejores ni peores) para cumplir una función específica en la historia del Universo. Las actitudes frente al Sionismo son positivas. Probablemente ningún judío Conservador crea que el Sionismo deba dejar de existir.

R: originariamente negaban la noción de ser “elegidos” por sobre otros seres humanos y no estaban a favor del Sionismo debido a que creían que la “Misión de Israel” como pueblo era diseminar las enseñanzas morales judías por todo el mundo en lugar de circunscribirlas a un punto geográfico determinado. Ambas posiciones han sido revisadas en las últimas “reformas” del movimiento.

 

Actitudes frente a estudios seculares (no particularmente judíos)

O: varía de un rechazo total hacia aquellos que lo aceptan si es beneficioso económica o monetariamente y si de hecho puede llegar a aumentar la comprensión de la Tora y el Talmud.

C: positivo.

R: positivo.

 

Fortalezas del movimiento

O: sentimiento que uno esta practicado un judaísmo “genuino” o más “verdadero”. Mayor compromiso y devoción con el estudio, las prácticas y las palabras de los rabinos.

C: flexibilidad para interpretar la Halaja. Mayor profesionalismo académico con respecto a los textos. No es restringida en materia social (posibilidad de ver películas en el cine que puedan llegar a contener imágenes sexuales o escuchar ópera o música “clásica”). Mayor tolerancia hacia otros movimientos e interpretaciones.

R: encaja perfectamente con la noción de religión si es eso lo que uno esta buscando. No se construye sobre nociones de “culpa por incumplimiento” y no es restringida en materia social (posibilidad de ver películas en el cine que puedan llegar a contener imágenes sexuales o escuchar ópera o música “clásica”). Gran adaptabilidad a los nuevos desafíos históricos. Tolerancia hacia otros movimientos e interpretaciones incluidos grupos ateos.

 

Debilidades del movimiento

O: poca flexibilidad y poco deseo de intentar aceptar un encuentro simbiótico con el mundo Moderno y sus desafíos. Rechazo de la interpretación Crítica Moderna (CM ver mas arriba para detalles). Problemas para resolver contradicciones entre las lecturas medievales en contraposición de las modernas de la Tora y el Talmud para resolver cuestiones legales tanto de carácter mundano como religioso en la actualidad (por ejemplo el feminismo, etc). La Ley como algo que uno debe “incorporar” y no “aprender” (uno no estudia para saber más sino que el conocimiento esta dado de antemano, la Ley ya esta decretada y uno no “estudia” sino que “absorbe” presupuestos preestablecidos y debe incorporarlos sin refutarlos). Poca tolerancia a otras interpretaciones que no sean las del grupo mismo debido a un principio binario (es decir “correcto” o “incorrecto”, “si” o “no”, “ortodoxo” o “nada”). Dicho principio binario de “bien” o “mal” acarrea psicológicamente problemas graves de “culpa” si se cree que se ha transgredido algo que es considerado sagrado.

C: ser una posición intermedia siempre tiene cosas a favor y en contra. La mayor debilidad actual es la poca observancia de preceptos (mitzvot) entre sus miembros (y algunos de sus rabinos). Al no estar constituido sobre un principio binario (es decir “correcto” o “incorrecto”, “si” o “no”) se crean problemas de identidad, pertenencia y a veces “culpa”. El fervor religioso es relativamente bajo. El estudio de la tradición (Tora y Talmud) también es menor comparado con la ortodoxia. Problemas para sincerar la creencia y práctica del judaísmo debido a una profunda racionalización con respecto a la Tora, el Talmud y la Halaja.

R: las plataformas Pittsburgh que constituyen lo que el movimiento afirma han cambiando notablemente entre 1885 y 1999 demostrando claras inconsistencias que si bien estas inconsistencias son parte del espíritu “reformista o progresivo” que celebra que las mismas existan (ya que estipula que la vida misma muchas veces es así, el mundo cambia constantemente y los nuevos desafíos que suceden todos los días deben ser reformulados a la luz de la tradición) dichas inconsistencias terminan cansando a quienes buscan “Una Verdad” y “Un Sentido” a sus vidas judías. Al no tener un principio binario (es decir “correcto” o “incorrecto”, “si” o “no”) se crean problemas de identidad, pertenencia y a veces aunque no siempre un sentimiento de “culpa”.

 

 

Jabad Luvabitch

Para finalizar debemos aclarar que Jabad Lubavitch representa hoy la cuarta corriente o movimiento global más importante judío pero a diferencia de lo que muchos creen dicho movimiento no es Ortodoxo sino Jasidico. Jabad Luvabitch es uno de los movimientos que mas admiro y respeto en la agenda actual judía.

Jabad también es una corriente relativamente nueva ya que se funda alrededor del siglo XVIII y por lo tanto tiene un poco más de 200 años de historia. En un pueblo como el judío, 200 años no es nada, es tan solo dos o tres generaciones.

Una de las cosas más extraordinarias de Jabad es que siendo un movimiento Jasidico, la mayoría de sus seguidores no son ni Jasídicos ni Ortodoxos ni tampoco con intenciones de llegar a ser alguna de estas dos cosas. De hecho la mayoría de los judíos que asisten a las “Casas Jabad” encuentran un entorno muy cálido e inclusivo donde no hay realmente ningún tipo de compromiso con dicha comunidad. Jabad es increíblemente exitoso en este objetivo de abrir escuelas, centros de ayuda social y “Casas Jabad” ofreciendo servicios religiosos y ayuda a todos los judíos del mundo presentando un modelo Institucional que es de hecho lo opuesto a lo que hacen todas las demás comunidades e Instituciones religiosas judías.

Cualquier comunidad judía tiene un modelo en el cual uno se hace miembro de dicha comunidad, paga una cuota y la comunidad misma le da a uno servicios de todo tipo: clases, actividades para adultos y niños y acompañamiento en el ciclo de vida de los miembros de la comunidad.

El modelo institucional de Jabad es exactamente el opuesto: comienza por brindarle a uno y su familia servicios sin que uno pague nada. Uno y la familia de uno se convierten en lo que llamamos “un amigo de la casa”. Pero nada es gratis en el mundo material en que vivimos y con el paso del tiempo un día Jabad necesitará algo de uno (puede ser ayuda voluntaria o monetaria siendo ésta última generalmente la más común) y en consecuencia uno siente el deber moral de darle algo a Jabad por todo lo que hecho en “forma gratuita” por uno durante tanto tiempo.

Pero Jabad no espera que uno sea haga miembro de su Sinagoga ni le vende sitiales para las Fiestas. Este es uno de los motivos principales por el cual la mayoría de los judíos que frecuentan instituciones de Jabad no se hacen jasídicos ni tampoco se hacen necesariamente ortodoxos porque Jabad no requiere eso como condición a diferencia de lo que si requieren generalmente las Instituciones Ortodoxas. Por eso repetimos que Jabad no es Ortodoxo sino Jasidico y posee un Jasidismo particular diferente a los demás Jasidismos que existen.

No hace falta ser Ortodoxo ni hacerse Jasídico para usar los servicios de Jabad sino que lo que ellos ofrecen es un entorno abierto en el cual los luvabitchers quieren que uno haga mitzvot porque creen que haciendo que uno cumpla mitzvot se balancea el orden cósmico. Justamente el rol y función de los shlujim, los emisarios del séptimo y hasta ahora último Rebbe (Schneerson), es llevar acabo esta misión en nombre de su líder con el objetivo de lograr acelerar la llegada del Mesías que en definitiva para algunos luvabitchers esa llegada es en realidad un retorno porque creen que el Mesías ya ha pasado por el mundo y ese Mesías fue (o sigue siendo) su propio Rebbe (Menajem Mendel Schneerson). Este es el motivo por el cual los shlujim tienen realmente esta idea fija grabada en su cabeza y la expresan claramente al declarar una y otra vez “Mashiaj Ya!” que podría entenderse en su propia teología como “Que reviva el Rebbe Ya!”.

Claramente la gente que va Jabad y los emisarios de Jabad no están preocupados por hacer que todos se pongan a comer casher. Jabad a diferencia de las comunidades Ortodoxas mayoritarias no rechaza por ejemplo a las mujeres que entran con “jeans”, pantalones o remeras a sus sinagogas. En Jabad no hay ningún tipo de filtro. El mensaje es claro: “acércate, di “lejaím”, brinda con nosotros cantando unos niggunim gritando en forma excitada y vendrá el Mesías (que para algunos significa literalmente que volverá a vivir, en alguna forma tal vez no biológica pero milagrosa, el septimo Rebbe)”.

En lo personal como ya dije admiro muchísimo la misión de Jabad Luvabitch y creo que desarrollan una función maravillosa llevando el judaísmo a los rincones más remotos del planeta y ocupándose publicamente de hacer presente su judaísmo en todos lados. Con respecto a eso creo que los otros movimientos tienen mucho que aprender de Jabad aún. Como judío viviendo en Asia si visito por ejemplo Thailandia o China y necesito comprar carne casher se que los que realmente pueden ayudarme son los luvabitchers.

Pero también soy consciente de cuál es la propia Misión de Jabad y los shlujim y si bien la respeto muchísimo no comparto personalmente la idea que el septimo Rebbe haya sido o sea el Mesías de alguna forma u otra. Imagino que Jabad tampoco le preocupa que yo me convenza de eso mismo y como son de hecho judíos jasidicos y en consecuencia «piadosos» no faltarían el respeto de quien le dijera eso porque si así lo hicieran dejarían de ser jasidicos o incluso tzadikim (justos).  Pero lo que quiero argumentar es que la calidez de muchos shlujim y luvabitchers es maravillosa y los siento una parte tan importante del judaísmo como los movimientos Ortodoxos, Conservadores y Reformistas.

 

 

Conclusiones

Con esta publicación no quiero sugerir que los diferentes movimientos judíos son unos mejores o peores que los otros ni tampoco quiero sugerir que uno de ellos es «verdadero» y los demás son falsos o distorsionados. No creo que exista algo así en el esfuerzo sincero de todos los judíos por encontrar sentido a sus vidas. Si no fuera así tampoco entendería porque Dios permite la multiplicidad de opiniones en el judaísmo y estando Dios a cargo del devenir histórico supongo que no debería permitir que existan distintas maneras de entender lo judío. Solo estamos intentando comprender las aproximaciones judías a la modernidad.

Como mencioné en mi publicación sobre «Esto es lo que creo«:

«creo en la lealtad a todos los judíos de todas las diferentes denominaciones e interpretaciones, de todas las corrientes sean ortodoxos, conservadores, reformistas, sionistas, seculares, reconstruccionistas, jasídicos, etc. todos ellos. No hay ningún judío ni ninguna corriente del judaísmo que cortaría del grupo porque creo que cada judío y cada corriente nos enriquece con diferentes valores y diferentes mensajes que son también importantes para el judaísmo. Al mismo tiempo hay que entender que es muy difícil evaluar al judío de al lado. A la gente le encanta jugar el juego de quién es un buen judío. Herzl jamas se puso un Tefilin en su vida. ¿Podemos decir que Herzl, el arquitecto del Sionismo judío a quien le debemos entre tantos otros la creación de Medinat Israel, no era un buen judío? ¿Devaluamos a Einstein porque no quería ni le interesaba ir a la Sinagoga? ¿Cómo puede uno evaluar quién hace una contribución a la tradición judía y al pueblo judío? No es tan simple.

Pero algo que si sabemos es que necesitamos el contrapunto de todas las voces del judaísmo porque siempre hemos hecho eso.

Quiero decirles una última cosa antes de concluir. La gente me pregunta ¿por qué los judíos no están unificados en un solo movimiento? ¿Por qué hay tantas corrientes tan diferentes entre los judíos? Y la respuesta es que primero y principal nunca estuvimos unificados. Lean la Tora, lean el Talmud, lean la historia judía y verán que los judíos siempre hemos peleando unos con los otros y es lo que hacemos y siempre hicimos. No es lo único que sabemos hacer pero es lo que hacemos. La ridícula idea que solíamos estar todos juntos y pensar del mismo modo en la antigüedad es un mito. ¿Saben por qué el Templo fue destruido según los Rabinos del Talmud? Por peleas internas y odio entre judíos. Peleas que existían miles de años antes que aparecieran los reformistas, los sionistas, los ortodoxos, etc.

La idea que los judíos tienen múltiples voces dentro de la tradición ha sido siempre verdadera y debemos de hecho ser un coro donde cada parte contribuye al todo de la obra de Dios.
Pero la idea importante aquí es que Dios no quiere un solo modo de ser, un solo modo de entender la vida, una sola manera de leer la Tora, una sola manera de entender la tradición judía e incluso una sola manera de entender lo que quiere porque si fuera así no nos hubiese creando tan diferentes los unos a los otros.  En la Mishna los Rabinos dicen que cuando un Rey estampa una moneda todas las demas monedas son iguales. Pero cuando el Rey de Reyes estampa un ser humano todos los demas seres humanos son diferentes.

Por lo tanto sean conscientes y no crean a quienes dicen que el judaísmo nunca cambió. Siempre ha cambiado y siempre cambiará.
Sean conscientes y no crean si alguien les dice que hay que hacer desaparecer cualquier parte, movimiento o corriente dentro del judaísmo. Necesitamos cada voz y cada discrepancia. Incluso cuando estamos violentamente en desacuerdo. Necesitamos el contrapunto de disonancias como parte de la obra de Dios porque eso es lo que nos ayudó a sobrevivir durante miles de años a todos los grandes imperios y civilizaciones del pasado sin enfrentarnos militarmente sino resistiendo culturalmente acompañándonos como una gran familia que como cualquier familia no siempre esta de acuerdo en todo pero se une en bendición para celebrar cada nacimiento, cada chico o chica que hace su bar o bat mitzvah, cada pareja que llega a la jupá y llorando cada alma, cada nombre que abandona nuestra familia (sin importar si es un soldado israelí secular que nunca comió kasher o el rabino mas obsesivo de la ley). Estos valores junto al poder interpretativo de textos y la recursividad del lenguaje nos han hecho eternos. Y si hay algo que podemos enseñarle al mundo es que ser una or lagoim significa abrazar lo diferente y celebrar la diversidad como hacemos dentro de nuestra propia familia. Esto esta en el corazón del judaísmo y es un mensaje maravilloso para compartir con un mundo que generalmente es indiferente con el sufrimiento ajeno e intolerante con aquel que piensa distinto. Nosotros no somos así. Nosotros abrazamos la diversidad porque entendemos que eso es ser parte de la familia humana«.

Una forma más poética de expresar esto mismo es utilizando la canción de Silvio Rodrigues «Fábula de los tres hermanos». Cada hermano en la canción representa una corriente y pensamiento actual judío. Pero lo más interesante para mí es la moraleja de la canción: todos buscando lo mismo de distintas maneras no pueden conseguirlo

Fábula de los tres hermanos

De tres hermanos el más grande se fue
Por la vereda a descubrir y a fundar
Y para nunca equivocarse o errar
Iba despierto y bien atento a cuanto iba a pisar

De tanto en esta posición caminar
Ya nunca el cuello se le enderezó
Y anduvo esclavo ya de la precaución
Y se hizo viejo, queriendo ir lejos, con su corta visión

Ojo que no mira más allá no ayuda el pie
óyeme esto y dime, dime lo que piensas tú

De tres hermanos el de en medio se fue
Por la vereda a descubrir y a fundar
Y para nunca equivocarse o errar
Iba despierto y bien atento al horizonte igual

Pero este chico listo no podía ver
La piedra, el hoyo que vencía a su pie
Y revolcado siempre se la pasó
Y se hizo viejo, queriendo ir lejos, a donde no llegó

Ojo que no mira más acá tampoco fue
óyeme esto y dime, dime lo que piensas tú

De tres hermanos el pequeño partió
Por la vereda a descubrir y a fundar
Y para nunca equivocarse o errar
Una pupila llevaba arriba y la otra en el andar

Y caminó, vereda adentro, el que más
Ojo en camino y ojo en lo por venir
Y cuando vino el tiempo de resumir
Ya su mirada estaba extraviada entre el estar y el ir

Ojo puesto en todo ya ni sabe lo que ve
óyeme esto y dime, dime lo que piensas tú

Para una explicación detallada de todo este tema recomiendo mi serie de publicaciones sobre «El Judaísmo Moderno«

Archivado en: Educación Judía Etiquetado como: comunidad, conservador, conversos, diferencia entre Ortodoxo, el feminismo, en la Modernidad, Feminismo, israel, Jabad Luvabitch, maimonides, modernidad, ortodoxo, Rabinos modernos, rashi, reformista, religion, Sionismo, spinoza

Lo más leído

  • Ayin: el concepto de Dios como Nada en el Misticismo Judío
  • El órgano más poderoso del cuerpo
  • ¿Cuál es el significado más profundo de Sucot?
  • El Mejor Comentario de RaShi a Toda la Tora - Humildad, Ignorancia, Curiosidad y Asombro
  • Esto es lo que necesitas recordar para nunca quedarte solo
  • Qué pregunta debes cambiar para no tener miedo a la muerte
  • ¿Estás seguro que quieres ser libre para pensar y hacer lo que quieres?
  • La razón irracional de la Halaja: un sistema absurdo para lidiar con el absurdo
  • "El Violinista en el tejado estaba equivocado": porqué el judaísmo está espiritualmente ascendiendo más que nunca
  • ¡No mandes a tus hijos a ese colegio! La educación infinita y el juego del miedo educativo en Chile

¡EXPANDÍ TU SABIDURIA!

 

diostapa




Acerca del Autor

 Hola, soy Diego Edelberg, el fundador del blog Judios&Judaismo.com. Me apasiona todo lo relacionado con la música, el judaísmo, la interpretación, la educación, la mitología, la filosofía, la religión, la ciencia, la historia, el arte, la física, la cosmología, la evolución, la sociología, la epistemología, la metafísica, la cabalá y en especial aquello que resulta contradictorio, paradójico y absurdo. Para conocer más sobre mi y de qué se trata mi blog visitá la sección Acerca del Autor

Todas las Publicaciones

Nube de Etiquetas

antisemitismo biblia comunidad conciencia conservador conversos diferencias dios duda edad media educación judía el cristianismo el siglo xx en la Modernidad esencia existencia de dios expectativa hong kong israel Jerusalem judaismo judios kabbalah la biblia las religiones maimonides mandamiento midrash misticismo misticismo judío modernidad ortodoxo pesaj plegaria pueblo de israel rabino reformista religion sentido shema israel siglo xvi Sionismo spinoza talmud tora

No me sigas, conversemos

  • E-mail
  • Facebook
  • Google+
  • Twitter

Copyright © 2019 · Aspire Theme en Genesis Framework · WordPress · Iniciar sesión