Imagina un lugar donde puedas decir lo que quieras y vivir como quieras. Puedes ser totalmente indiferente a la opinión de los demás y sus vidas. Puedes vestir como quieras e incluso y si lo deseas andar sin ropa. Puedes comer y beber lo que quieras. Un lugar sin limites, sin etiquetas, sin demandas, sin obligaciones, sin “deber ser”, sin culpas ni disculpas. Un lugar en que eres totalmente libre y nadie espera que te comportes de un modo u otro. No hay obligaciones sino libertad absoluta. Tienes todos los derechos y no se te exige nada. ¿Qué título le pondrías a un lugar así? Si lo llamaste “un paraíso” entonces acertaste. El único detalle es que ese lugar no está destinado para que tú y los seres humanos puedan vivir allí. Ese lugar es una ficción de tu imaginación.
Al comienzo de la narrativa de la Creación en el Libro de Bereshit (Génesis), los primeros humanos habitan en un lugar llamado el Jardín del Edén. En ese lugar pueden andar desnudos junto a las demás criaturas y no precisan preocuparse demasiado por lo que dicen y hacen. No tienen que “quedar bien” con nadie y pueden decir lo que se les antoja. Sin embargo, allí son humanos pero aún no son “seres” humanos. Para “ser” humanos aún les queda por aprender la lección más importante de todas: ser vergonzoso. Ser humano es tener vergüenza. Solamente la indiferencia permite andar sin pudor y sin vergüenza. En cambio la empatía, necesaria para “ser” humano, precisa pudor y vergüenza.
El maestro en esta lección que convierte a los humanos en “seres humanos” es ni más ni menos que Dios. Dentro de esa libertad absoluta que hay en el Edén, Dios impone una sola condición: “Puedes comer del fruto de todos los árboles que hay en el jardín, excepto del árbol del conocimiento del bien y del mal (2:16-17)”. Como un gran educador, Dios sabe que no hay mejor manera de tentar y generar una disonancia cognitiva en sus criaturas que dándoles permiso para todo menos una sola cosa. Esa cosa, ese árbol con ese fruto, se convierte en una obsesión, aquello que está en el centro de todo lo demás. Los humanos ahora están desesperados por probar el fruto y en la narrativa magistral, es Dios omnisciente que todo lo sabe quien ha planeado que eso suceda. Dios necesita humanizar a los humanos. Antes de comer el fruto prohibido, “Los dos, el hombre y su mujer, estaban desnudos, pero no sentían vergüenza de verse así (2:25)”
La creación del vergonzoso
Existen incontables interpretaciones a la famosísima narrativa de la Creación de los primeros humanos y el significado de comer el fruto prohibido. Algunas interpretaciones lidian con la sexualidad y otras con la consciencia de la muerte. Pero, ¿cuál era la intención de esta narrativa? ¿Qué quiere enseñarnos? Quizás todas las interpretaciones ofrecidas sean correctas porque de eso se trata la Tora como una obra abierta, siempre dispuesta a las infinitas posibilidades del lector que se acerca con su propio esquema de referencia y subjetividad. De todos modos creo que una lección que podemos perdernos entre las muchas posibles interpretaciones, es que se trata de aquello que hace a los humanos devenir en seres humanos: el aprendizaje de la vergüenza como modo más auténtico y honesto de la existencia de nuestra especie.
Una vez que los humanos comen del fruto prohibido sienten vergüenza puesto que “en aquel momento se les abrieron los ojos y descubrieron que estaban desnudos, por lo que entrelazaron unas hojas de higuera y se taparon con ellas (3:7)” Cubrir el cuerpo es sentir pudor. Los animales no deciden taparse ni vestirse. Los seres humanos nos cubrimos el cuerpo desnudo. No lo hacemos porque el cuerpo sea malo sino porque desarrollamos vergüenza de mostrarnos en nuestra totalidad. Ser humano es sentir que existe algo adecuado y algo inadecuado que no puede ser dicho. Algo ético y algo inmoral que no puede hacerse. Algo que puede ser parte del escenario de la vida y algo que es obsceno (palabra que en su etimología significa “lo que debe quedar fuera de la escena”). Devenimos en seres humanos al incorporar a nuestro cuerpo y alma el fruto que produce el conocimiento del bien y del mal nutriéndonos de vergüenza.
Si esta interpretación es correcta, ser auténticamente humano según la Tora es hacer y decir “lo que se debe”. Esto no quiere decir eliminar “lo que se quiere” sino entender que el desarrollo de la humanidad requiere una síntesis para “querer lo que se debe”. Como contraparte, decir todo lo que pensamos y hacer todo lo que queremos no es parte del contrato de la especie humana sino de las bestias. Pero es aquí donde lo natural se puede confundir con lo artificial y lo auténtico con lo inauténtico. Lo natural y auténtico que nos permite ser funcionales en la vida es que lo que digamos y hagamos sea lo que queremos decir y hacer siempre precedido en deber por un sentimiento de vergüenza. Lo artificial e inauténtico que no nos permite ser funcionales en la vida sino que nos lleva de vuelta al Jardín del Edén del cual estamos destinados siempre a salir luego de recordar la vergüenza olvidada y readquirirla, es que digamos y hagamos lo que queremos siendo unos sin vergüenzas. En conclusión, la vergüenza no es algo malo que debemos superar. Por el contrario es lo que debemos incorporar y recordar para no claudicar una y otra vez en el retorno del Jardín del Edén.
No te quedes solo: ten siempre vergüenza
Finalmente, la prueba más contundente de la artificialidad de vivir sin vergüenza es la enfermedad que produce según la tradición judía. Esta enfermedad espiritual es la peor de todas. Se llama tzaarat y es producida por hacer lashon hará, es decir hablar mal de otros, difamarlos, ser chismosos y estar incluso dispuestos a escuchar que nos hablen mal de los demás (ver Parashot Tazria y Metzora con los comentarios rabínicos al respecto). Según la Tora, la persona que se infecta del lashon hará debe ser puesta en cuarentena, separada y aislada permaneciendo en soledad. Solamente puede regresar luego de ser purgada recuperando la vergüenza. Pasando simbólicamente un tiempo en una suerte de Jardín del Edén solitario, si la persona no logra recordar el sabor del fruto y unificarse en la integridad de la especie que demanda pudor en sus palabras y acciones, no puede regresar y reinsertarse a la sociedad. Quien dice lo que quiere y hace lo que se le antoja, jactándose de su supuesta coherencia y honestidad, termina en soledad. La gente lo abandona y lo considera peligroso. El sin vergüenza no es querido. Y es precisamente el lenguaje, el fenómeno más poderoso de nuestra especie diferenciándonos del resto de las criaturas, el que debe ser sanado. Si el lenguaje es lo que nos diferencia de las bestias entonces el lenguaje tiene que tener vergüenza. Es el lenguaje el que tiene el potencial de generar amor, respeto, relaciones y comunidad. También puede generar odio, destrucción y guerras. El lenguaje es como nos hablamos a nosotros mismos en nuestras cabezas y organizamos y vemos nuestra vida.
Hacer lashon hará (difamar y ser chismosos) es lanzar una flecha que una vez disparada no puede volver a recuperarse. Después de haberla arrojado, de haber dicho lo que no debe ser dicho y haber hecho lo que no debe ser hecho, no se puede regresar al antes. Se puede pedir perdón pero ya no será lo mismo. Cuando algo que no debía decirse es dicho y cuando algo que no debía hacerse fue realizado ya no vemos a esa persona como ser humano y como parte de nuestra especie. Lo consideramos una bestia que ha violado el contrato y pacto social de coexistencia humana. De ahora en más deberemos vivir con las consecuencias de lo dicho y hecho sin ese pudor que ofrece el fruto del conocimiento del bien y del mal. Por eso no son las armas las que asesinan y separan a los humanos sino las palabras que articulan ideas destructivas y luego la boca que da la orden de matar. Precedido por la vergüenza, es ese mismo instrumento de honestidad humana el que dice sin indiferencia “gracias”, “perdón” y “te amo”.
Abraham Joshua Heschel enseña que, “La vergüenza es una protección contra los males internos. Contra la arrogancia, la edificación del sí mismo. El final de la vergüenza sería el fin de la humanidad. La vergüenza precede al compromiso religioso, es la piedra fundamental de la existencia religiosa. Tengo miedo de la gente que nunca se ha avergonzado en su propia mezquindad, prejuicios, envidia y vanidad; nunca avergonzada en la profanidad de la vida. Me estremezco al pensar en una sociedad gobernada por personas que están absolutamente seguras de su sabiduría…cuyas mentes saben ningún misterio, no hay incertidumbre. El mundo necesita un sentido de vergüenza. («What is a man?, pág. 114»)”
Magistral querido Diego !!!
Clarisimo.
Como siempre lleno de sabiduría! Gracias por tan hermosa y útil reflexión!!!
Es posible sanar de las palabras hirientes que alguien lanza en contra de uno ?
Es muy difícil pero necesario para seguir viviendo.
Es cierto que después del después ya no se puede regresar al antes.
Si me dijeron algo hiriente, después de eso ya no puedo volver a ver a quien me hirió como si no lo hubiera dicho.
Lo que nos queda por delante es conversar, intentar reparar y lo más difícil que la tradición judía pone al centro de todo: perdonar
Gracias!
Exelente disertacion mi amigo Diego dicho con todo respeto
A muchos seres humanos nos falta aprender y sentir en verdad
lo que es la verdadera vergüenza, el pudor y el respeto, esto es solo el inicio, debemos de mejorar en todos estos valores de nuestra vida.
Un abrazo
Bendiciones y Salud B.H
Estoy de acuerdo Arturo.
No escribo como quien tiene esto resuelto en su vida sino que lo concientiza para que todos podamos mejorar.
Abrazo
Bendiciones Diego shalon alegein
Aleijem Shalom Juan
Hola Diego. Leí. La vergüenza de Adán y Eva, siendo ellos únicas criaturas, al hacer lo prohibido y la idea de hablar mal y cuarent, como consecuencia ¿no trae una contradicción?. Adán hablaría mal de Eva. Y Eva de Adán. El aislamiento de uno trae el del otro. Quiero decir que tal vez Lishon Hará no derivaría claramente de ese pasaje. Y el pudor. ¿en soledad?. Si somos distintos. ¿Es pudor realmente? Tal vez no interprete. Shalom Diego.
Muy bueno Diego! Gracias y Jag Pesaj Sameaj
Gracias, Moadim Lesimja!
Siempre aportando conocimientos. Gracias
Gracias Diego! Nunca me había detenido en el asunto de la vergüenza.
Sameah Pesach!
Gracias Maria, yo tampoco hasta hace poco tiempo pude unir estos conceptos
De acuerdo mi querido Diego.
Gracias Ruben!
Moadim Lesimja
Suena al discurso de los millennials. Dicho sea de paso mi generación, pero yo me les escape. Leí un libro, de rabino Alicia tatz el joven judío. Y vaya que me encantó entender por qué soy diferente, nos escogió Bore Olam entre los pueblos, y él me redime y amo con todo mi corazón la responsabilidad que nos ha dado y eso me hace diferente entre todos. Entiendo tanto a mis 26 años y me siento tan orgulloso y enamorado de Am Israel, de existir. Aunque no te conozco, te conozco por qué de menos en alguna parte, me conozco a mí. Ahora estoy solo materialmente. Me mudé de país. Estoy en proceso de estar en la comunidad sefaradi en un país anglofono. Podrías entender una alegría cómo está? Soy diferente, estoy solo por eso, pero soy capaz de verlos a todos a la distancia y amo la vida como es. Sobreviviré.
El libro de Akiva Tatz «Joven y judío» es un lindo libro para leer. No sé si es solamente un tema de los milennials. Creo que el sin vergüenza puede ser de cualquier era. Por eso tiene que ser sanado.
Un abrazo y gracias por compartir tus palabras.
Moadim Lesimja
Hola Diego. Mi nombre es Karina y vivo en Perú.
Gracias por tus enseñanzas que nos conducen a una vida en sabiduría
Gracias!!
Hola Karina, gracias por tus palabras!
Saludos desde Chile
Quisiera hacerte una pregunta, en alguna ocasión mi esposo leyó que después de crear el mundo Dios escondió las claves de la creación en el Universo y nuestra misión es encontrar esas claves. Sabes si ello es cierto y dónde puedo encontrar esta referencia.
Hola Mónica, lo que me cuentas suena muy parecido al relato de la Creación propuesto el Itzjak Luria. Aquí puedes leer más al respecto: http://www.judiosyjudaismo.com/2013/04/los-humanos-necesitamos-a-dios-o-dios-nos-necesita-a-nosotros/
Mil gracias, lo leeré con placer.
Y si te interesa me avisas porque hay varias publicaciones más sobre el tema en el blog.
Abrazo!
Gracias, me ayudo mucho la lectura. Aun me queda comprenderla totalmente, pero algo en mí se sintio muy feliz al leerte.
Yo también leo lo mismo muchas veces varias veces!
Un abrazo
Buenos días, que buen artículo, creo que esto le puede salvar la vida a cualquiera, muchas gracias por sacarnos de tanta ignorancia, definitivamente sufrimos por falta de conocimiento
Me alegra te haya gustado.
Me ha costado varios meses poder expresarlo de la forma más precisa que creo.
Es bastante contra intuitivo!
abrazo
Gracias Diego por compartir esta hermosa sabiduria.
Un abrazo de Luz
Juan Carlos
Gracias!
Claro y conciso, necesitaba estas palabras para definir lo que he venido percibiendo de tantas personas e incluso de mi. Gracias por tan especial lección a nuestras vidas.
Gracias German! Al igual que tú, necesitaba estas palabras incluso para mí también. Por eso las escribí!
un abrazo!
Gracias Diego
Ahh Pesaj Sameaj
Moadim Lesimja!
Aleccionador , un buen disparador para hacer introspección. Grax.
Gracias Claudia, me alegra leer que sirve como invitación a la introspección!
abrazo
Todáh Diego, muy edificante, cuando se pierde la verguenza se pierde todo.
Me sirvió mucho
Jag Sameaj Pesah
Tal cual! Sin vergüenza se pierde todo…¡me encanto!
Gracias Diego, por tan buen aporte, para seguir pensando y reflexionando
Siempre Jacqui! La seguimos en Shajarit 😉
Shalom Diego.
Muchas gracias por tus reflexiones. Son edificantes.
Saludos cordiales desde italia
Un placer! Desde Italia? Wow no sabía que estabas allí!
Así es ! Nacida en Uruguay, hace más o menos tres años que ando por el » viejo continente » Shalom Diego .
¿Quien tiene la verdad?
Pero hay algo que tiene un gran porción de certeza. Por lo menos lo que he comprobado a lo largo de varios años. Los sabios y muy buenas personas de nuestra historia y contemporáneos también (Tanto mujeres como hombres) te educan manifestando de que si eres autentico, y honesto, perdiendo la vergüenza de decir la verdad y enunciarla frente a todos , eres una excelente persona. Pero lo cierto indefectiblemente es que si dices todas las verdades y de frente, te quedas solo.
Hola Marcos,
Tu comentario me llevó a pensar algo que espero se haya entendido: ser vergonzoso no implica ser hipócrita ni mentiroso.
Lo que propongo es decir aquello que en las tripas sentimos que debe ser dicho y hacer lo que debe ser hecho (más allá de si es verdad o no ya que eso es otro tema) pero siempre tiene que emerger desde un lugar de humildad temperado por un sentimiento de vergüenza en tanto lo que voy a decir y hacer.
¿Se entendió esta diferencia? Por eso fui cuidadoso de no expresarlo en términos negativos. Necesitamos decir y hacer lo que debe decirse y ser hecho. Solo que siempre debe venir acompañado de vergüenza. La vergüenza aquí no es timidez, silencio, mentira u omisión. Todo lo contrario, es una humildad que antecede a lo que estoy por decir y hacer.
Abrazo grande!
Si entendí, muy claro
Muchas gracias Diego por contestar.
Me refería simplemente a decir de frente la verdad siempre en el mundo de hoy. Y no quedarse solo
Muy buenas apreciaciones:
Es momento de retomar ciertas acciones en este sentido
Así es Jorge, de nada sirve esto como una idea si no es transformada en experiencia!
Gracias Diego, un tema muy antiguo, con mucha actualidad… y algo en lo que creo, no nos ponemos a pensar, ni reflexionar.
Quizás es el mal mas expandido en la sociedad mundial: LASHÓN HARÁ . Y el mas justificado. Por eso, quizás actualmente, estamos mas en soledad, viviendo «en nuestro propio mundo»; y mas a través del desarrollo de la tecnología y de las redes sociales; que mas bien, son antisociales… ¿Estaremos comenzando la expiación de nuestra mala lengua? O ¿Estaremos comenzado a hacer avergonzados?
Necesitamos educarnos mas. Gracias nuevamente y Shalom.
Toda Diego por tomarte el tiempo para compartir la Sabiduría de Nuestro Elohim y Responder a todos los que se Enlazan por el Medio desde los Ángeles California para todos SHALOM.
Me gusto Jorge la asociación del lashón hara con el individualismo.
Quizás sea otra forma de entenderlo.
Yo soy una persona de fe: creo que estamos comenzando a querer hacer el deber.
Shalom
Sin duda alguna Diego; así es, quizás como dice una canción: he vivido en soledad, rodeado de multitud; nunca he conseguido amar… pues, no me quiero ni yo…
Posiblemente también El Dr. Rab Michael Laitman concuerda con tus disertaciones (con un punto de vista de cabalá)…
Nuestro ego, se llega a interponer entre las relaciones humanas…
También voy comenzado el proceso de la Emuná (fe); y sé y entiendo que todo es hecho con un propósito desde Los Cielos…
Todá rabá nuevamente por tu aportación
Shalom…
Diego: Qué magnifico es leer tu reflexión!, porque una vez más yo estoy buscando poner en orden algunas situaciones y ya sea a través de la web, o o de un libro llegan las palabras justas.
Me pasa siempre que me llega en el momento justo lo que estoy necesitando.
Se llama «min hashamyim» (caído del cielo).
Me alegra leer que te gustó esta reflexión.
Moadim Lesimja
Si el ser humano no reconoce los errores que comete, jamás conocerá la vergüenza.
Gracias Diego por tus exposiciones.
Así es Margarita, se quedará atrapado en un arrogante, soberbio y solitario Jardín del Edén.
¡qué pesadilla! 😀
Buenas tardes! Sus enseñanzas han sido extraordinarias! Me han inspirado mucho y ayudado a ser cada día mejor! Soy descendiente de judíos españoles que llegaron hace muchos años atrás a Venezuela.
Fui criada en un hogar católicos, siempre me sentí diferente en la enseñanza religiosa, era rebelde para inclinarme ante una imagen de yeso, después de un tiempo me dejaron tranquila ya adulta sintiendo esa curiosidad comencé a buscar la razón que me impulsaba a buscar el camino correcto al Abba, he aprendido palabras en hebreo por cuenta propia, desde que mis hijos nacieron les enseñe la existencia de un solo Di’s y amar a Israel como nuestro verdadero hogar.
Supe hace un poco más de dos años que éramos descendiente de judíos, cuando huimos de Venezuela y buscamos estar un poco estable en Perú, ha sido un poco difícil y estamos tratando de irnos a Chile.
Lo que me ha mantenido con firmeza es la Emuná al Abba! Sus palabras me llenan espiritualmente y ayudan a seguir adelante! Gracias por estar ahí siempre! !שלום
Gracias por tus palabras Keila.
Me alegra leer que estas publicaciones te han inspirado y ayudado en tu desarrollo espiritual.
Te deseo fuerza para seguir adelante!
Moadim Lesimja!
Querido Diego
Siempre me pasa que me encantan tus introducciones . «Que hay que saber para no quedarse solo.»
Nunca habia pensado a la verguenza de este modo.
Muy interesante todo el.artículo.
Jag Sameaj !! Besos
Jajaja si!
Me tomo siempre un buen rato para pensar los títulos e intentar hacerlos contra intuitivos!
Moadim Lesimja!
Abrazo grande
Gracias Diego, no deseo entrar en detalles, pero en lo personal tu reflexión a sido luz a mi vida. Un abrazo fuerte mi amigo.
Qué hermosas palabras Alhum!
Abrazo y gracias!
¡Excelenete!
Shalom Shalom.!!
Gracias!
SHALOM DIEGO, EXCELENTE PALABRAS PARA PONERLAS EN PRACTICA EN TODO.LA HUMILLACION DEL HOMBRE ANTE EL CREADOR YHWH ELOHIM ES LO PRIMERO EN EL DIA A DIA.
MUCHAS GRACIAS POR EL SALUDO SIEMPRE RECORDANDO LE SALIDA DEL PUEBLO DE YHRAEL DE EGIPTO COMO SU PALABRA LO MENCIONA.
YSRAEL-YERUSHALEIM LE OLAN VA-ED.
SHALOM DIEGO PARA TI Y TODA TU FAMILIA.
Un abrazo y gracias
Diego
Hola Diego,saludos y bendiciones.Con respecto al texto,yo pienso que todo eso ha formado parte de la debilidad del ser humano,ya que estamos arraigados a la banalidad de lo material y eso incluye las debilidades en que caemos,ya que vamos siempre detrás de una curiosidad o de aquello que nos llama la atención,sin importar los riesgos y de pronto en el vacío en que iremos a caer;lo triste es que debido a estos vacíos viene los temores,la inseguridad en nuestra personalidad,la miseria espiritual,porque siempre queremos hacer lo que nos plazca,es decir vivir con nuestras propias rebeliones sin importar lo que se nos venga. des afortunadamente el hombre siempre ha preferido la grandeza terrenal y menospreciado la riqueza espiritual,y eso refleja la falta de paz y tranquilidad es su corazón y en el entorno que lo rodea;de ahí deducimos la frase popular,por eso este mundo esta como esta.
Hola Hugo,
Yo no creo que el mundo está mal.
Soy una persona de fe y creo que cada vez está mejor.
Lo que sí creo es que para que esté aún cada día mejor es preciso ese control del que escribes: no dejar todo suelto al deseo sino también aprender a filtrarlo con vergüenza para generar empatía y unión.
Moadim Lesimja
Como siempre…
Espectacular el texto y mejor aun, la enseñanza inmersa en este texto.
Gracias, gracias, gracias, por tus enseñanzas.
Doy gracias a D-os, por haberte puesto en el camino de mi vida.
Diego, gracias mil, por todo lo que me entregas en cada texto, con ello, logro mejorar, cada día, un poco más, mi vida, en la medida, que voy leyendo, conociendo, asimilando, aprendiendo, internalizando, creciendo y proyectandome cada día como un mejor ser humano. GRACIAS¡¡¡¡¡¡¡
Rita, gracias por tus hermosas palabras!
Son la energia que me conmueve a seguir compartiendo lo que aprendo con el fin de contagiar y apasionar el saber milenario del pueblo judío.
Un abrazo grande!
Agradezco mucho esta hermosa reflexión , les envío un gran saludo cordial!!!
Un placer Miguel!
Muy bien argumentado, para compartir y analizar!
Gracias por tu tiempo y generosidad!
Shalom!!
Fabuloso expectacular la enseñanza y esto nos ayuda a que como seres humanos tengamos cuidado de no herir a las demas personas aunque te los confiezo a veces caemos en ese gravisimo error y esto nos hace como Ud.dice sentirnos en SOLEDAD ABSOLUTA. GRACIAS Y QUE EL TODO PODEROSO TE SIGA LLENANDO DE SABIDURIA. UN ABRAZO.
Excelente tema el de la vergüenza. Gracias, Diego por tu disertación. Me recordó la frase del cuento El traje nuevo del emperador. «El Emperador está desnudo», porque ciertamente alguien puede no darse cuenta de su desnudez, incluso en sus palabras, y es cuando sentimos pena ajena, e igualmente el pudor que uno siente al escucharlos. Shalóm v’todá rabá
Gracias Diego, me aclaraste porqué se prohibe el árbol del bien y del mal, siempre había tenido la duda de porqué no había acceso al conocimiento total. Somos humanos y debemos siempre vivir el misterio la incógnita, estar en la búsqueda.
Hasta pronto.
Maravillosa reflexión, gracias diego
Bendiciones!!!
Muy agradecido de usted. Es para mí un privilegio poder leer tan valiosos temas provenientes de una persona que estudia y sabe la temática. Nuevamente, muchas gracias.
Es una verdadera Delicia leer tanta sabiduría gracias Diego llego como una luz en mi vida.
Gracias Naomi!
Shalom estimado Diego. Te doy las gracias por tu brillante exposición, que en lo personal a nutrido y fortalecido mi alma y enriquecido el conocimiento. Un brazo fuerte desde Santiago de Chile.
shalom bendiciones , toda raba mi querido Diego , porque todos tus comentario son siempre tan acertados que pegaron en mi vida me as echo refleccionar por que yo e caido en verguensa y tengo que trabajar mas en este tema saludos fuerte abraso mi querido Diego desde cuernavaca morelos Mex.